EL TJUE da la razón a España y anula la decisión de Bruselas sobre participación de Kosovo en reguladores europeos
Permite permanecer a Kosovo hasta la entrada en vigor de unas eventuales nuevas normas de trabajo
BRUSELAS, 17
EL Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) ha dado la razón este martes a España en el litigio que mantenía contra la Comisión Europea por permitir a Kosovo participar en el Organismo Europeo de Reguladores de Comunicaciones Electrónicas (ORECE) y ha anulado la decisión alegando que Bruselas no tenía competencias para establecer las normas de participación de terceros países.
En una sentencia en última instancia, el TJUE atiende el recurso de España contra la decisión previa del Tribunal General y considera que incurrió en error de Derecho al tratar la competencia para establecer las normas de trabajo aplicables a la participación de agencias reguladoras de terceros países en el ORECE, que corresponde al propio organismo y no al Ejecutivo europeo.
«La interpretación del Tribunal General no es conciliable con la independencia del ORECE y no se atiene al reparto de competencias entre, por una parte, la Comisión y, por otra, el ORECE y la Oficina del ORECE», recoge la sentencia que insiste en que la Comisión Europea solamente tiene una «función de control» en este caso.
De esta forma, el TJUE resuelve a favor de España y anula la decisión de Bruselas, dado que no era competente para adoptar la participación de Kosovo en esta institución, si bien, mantiene los efectos de la decisión de la Comisión hasta la entrada en vigor de unas eventuales nuevas normas de trabajo acordadas entre el ORECE, la Oficina del ORECE y la agencia reguladora de Kosovo, que tienen que llegar en el plazo de seis meses.
Este fallo sigue la opinión del Abogado General del Tribunal General de la Unión Europea que dio el pasado junio la razón a España en su recurso para anular la decisión de la Comisión Europea, al entender que no estaba facultada para adoptar dicha decisión. España presentó un recurso de casación ante la justicia europea, después de que el Tribunal General de la UE desestimara un primer recurso español de anulación.