Puig dice que el trasvase no puede ser «motivo permanente» de «confrontación territorial» y aboga por un «equilibrio»
VALÈNCIA, 14
El president de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, ha defendido que el trasvase Tajo-Segura «no puede ser un motivo permanente de confrontación territorial», al tiempo que ha abogado por «buscar un equilibrio que cuente con la cuestión medioambiental, la economía y los puestos de trabajo».
En estos términos se ha pronunciado Puig este sábado en declaraciones a los medios de comunicación durante la celebración de los VII Premios del Turismo SER Viajeros Comunitat Valenciana.
«Lo que no se puede es plantear una confrontación territorial (en el trasvase) ni se puede plantear un cambio disruptivo que no aproveche todos los recursos disponibles», ha manifestado, y ha asegurado que ha exigido que «el mix sea claro y sea garantizable para todos los regantes».
El jefe del Consell ha subrayado que «lo que quiere» la Generalitat es «garantizar agua para siempre para los regantes de la provincia de Alicante, pero también para el conjunto de la Comunitat». «Nuestro planteamiento es desde el diálogo y buscando una palanca de progreso y no de retroceso», ha afirmado.
«No planteamos la irracionalidad o una posibilidad que no es razonable que sería no hacer nada», ha considerado, y ha reiterado su defensa al «cumplimiento del caudal ecológico». «Pero un caudal ecológico que sea el que de verdad se necesite para el río», ha apostillado.
Por todo ello, ha reivindicado que «el Acueducto Tajo Segura en estos momentos es irrenunciable, como lo es también aprovechar la desalación, la recuperación y la reutilización y buscar una fórmula para que la huerta de Europa no se vea afectada por los recortes».
«El agua es una fuente de energía, de empleo, de vitalidad. Es absolutamente imprescindible para cualquier ciudadano y, desde luego, para las actividades económicas», ha destacado, aunque ha aseverado que también es «consciente» del cambio climático.