Díaz asistirá a la toma de posesión de Lula da Silva como presidente de Brasil junto al Rey Felipe VI y Albares
La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha confirmado este viernes que asistirá a la toma de posesión de Luiz Inácio Lula da Silva como presidente de Brasil el próximo 1 de enero y lo hará compartiendo delegación española con el Rey Felipe VI y el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares.
En declaraciones a los medios tras reunirse con su homólogo uruguayo, Pablo Mieres, la ministra ha defendido que los vínculos de España con Lationamérica «son trascendentales», por lo que el Gobierno español estará «siempre» a favor de los países de esta región, con los que comparte «historia y retos comunes», además de una «cultura y economía» que son «próximas».
Díaz ha recordado que acudió a la investidura del presidente chileno, Gabriel Boric, y también asistirá ahora a la de Lula da Silva en Brasil. «Será un honor como siempre representar a mi Gobierno y país», ha anunciado.
La vicepresidenta ya celebró la victoria de Lula da Silva el mismo día en el que se conoció el resultado de la segunda vuelta de las elecciones. «¡Ha vencido el #BrasilDaEsperança! La ciudadanía brasileira ha escogido mirar al futuro. Ha elegido a Lula para cuidar la democracia. Ahora, trabajaremos juntos por una América Latina y Europa de justicia social y climática», expresó en redes sociales.
Precisamente, la oficina de transición del presidente electo brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, informó este miércoles de que al menos 12 jefes de Estado, entre ellos el rey de España, Felipe VI, han confirmado su asistencia para la toma de posesión de Lula, prevista para el próximo 1 de enero.
Por otra parte, y cuestionada por la situación política en Perú, la titular de Trabajo ha reiterado su solidaridad con el pueblo peruano y ha declarado que «con la democracia no se juega». Así, junto al ministro uruguayo Mieres, ha defendido poner al trabajo «en el centro» frente a los cambios tecnológicos y las transformaciones en el modelo productivo. «Si hacemos una transición ecológica pero sin ser justa, probablemente nos vayamos a equivocar», ha avisado.
