España propone una cumbre de líderes de la UE con los socios del Mediterráneo durante su semestre de Presidencia
BARCELONA, 24
El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, ha anunciado que España quiere que se celebre una cumbre de líderes de la UE y los socios del Mediterráneo durante el segundo semestre de 2023, periodo en el que ocupará la Presidencia de turno del bloque.
Así lo ha desvelado al término del VII foro ministerial de la Unión por el Mediterráneo (UPM) que se ha celebrado en Barcelona, tras asegurar que el Gobierno quiere «situar la agenda euromediterránea en el centro de su Presidencia».
Una cumbre de líderes de las dos orillas «sería el colofón al acento euromediterráneo» que quiere dar España a su Presidencia, durante la que ya está previsto que haya una cumbre de líderes de la UE y la Comunidad de Estados de Latinoamérica y el Caribe (CELAC).
El Gobierno ha venido haciendo esfuerzos para conseguir una mayor institucionalización de la relación que la UE mantiene con la ribera sur del Mediterráneo para situarla al nivel de la que ya existe con los del este, el llamado Partenariado Oriental, según fuentes diplomáticas.
Actualmente, esta relación se vertebra por dos vías, la Unión por el Mediterráneo (UPM) y la Vecindad Sur. Precisamente Barcelona acoge hoy sendas reuniones de ministros de Exteriores de ambos formatos, siendo esta la tercera ocasión en que esto ocurre, algo que el Gobierno ve como una señal del interés que hay tanto en los países europeos como en sus vecinos del sur en seguir profundizando la colaboración.
La UPM la integran desde hoy 43 países, tras la entrada de Macedonia del Norte. Así, están presentes los 27 estados miembro a los que se suman otros quince países mediterráneos –Albania, Argelia, Bosnia, Egipto, Israel, Jordania, Líbano, Marruecos, Mauritania, Mónaco, Montenegro, Palestina, Túnez, Turquía y Libia–. En el caso de la Vecindad Sur, engloba a Argelia, Egipto, Israel, Jordania, Líbano, Libia, Marruecos, Palestina y Túnez.
FORO EN BARCELONA
Albares se ha felicitado de la elevada participación a nivel ministerial de la cita –han acudido 21 ministros, entre ellos el marroquí Naser Burita– y ha dejado claro que para el Gobierno es un foro «insustituible para poder establecer una zona de estabilidad y prosperidad compartida y una mayor integración y sostenibilidad de la región euromediterránea».
El ministro de Exteriores jordano, Ayman Safadi, que copreside la UPM junto con el Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell, también ha puesto en valor esta organización creada en 2008, destacando que países enfrentados en algunos casos sean capaces de trabajar juntos pero advirtiendo que la prosperidad solo será posible si se hace frente a las crisis del sur, entre las que ha hecho mención especial al conflicto entre palestinos e israelíes, ambos integrantes de la UPM.
Tanto él como Borrell y Albares, han recalcado la importancia de ofrecer oportunidades a los jóvenes de la orilla sur del Mediterráneo para evitar que tengan que emigrar hacia Europa en busca de un futuro mejor. «Los refugiados no seguirán viniendo a Europa si les ofrecemos la vida digna que merecen en el sur», ha defendido Safadi.
Por su parte, Borrell ha asegurado que aunque la UE está «preocupada y ocupada» con Ucrania no pierde de vista su «atención y compromiso» con los vecinos del sur. Así, ha reconocido que la «brecha» entre las dos orillas lejos de reducirse se agranda y ha defendido la importancia de «impulsar la estabilidad y la integración regional».
El Alto Representante, que no ha querido hablar de «inmigración ilegal, porque ninguna persona es ilegal, sino irregular», ha incidido que además de promover el desarrollo de estos países se debe trabajar también para ofrecer vías legales de inmigración «acordes con la capacidad de absorción de las sociedades europeas y sus necesidades de aportación de fuerza de trabajo» ya que hay muchos países que necesitan mano de obra exterior, entre ellos España.