Experto advierte de que la pandemia de COVID-19 ha agravado la resistencia a los antibióticos
El doctor Jordi Vila Estapé, jefe del Servicio de Microbiología del Hospital Clínic de Barcelona, ha advertido de que la pandemia de COVID-19 ha exacerbado el problema de la resistencia a los antibióticos a nivel mundial.
«No sabíamos cómo se comportaba la COVID-19, no se sabía si detrás podría haber alguna infección bacteriana. Así que se prescribieron muchos antibióticos. Luego se demostró que la realidad era otra», ha explicado el experto este martes en rueda de prensa.
Cada año, 1,2 millones de personas mueren en el mundo por bacterias contra las que los antibióticos se muestran ineficaces; de ellas, cerca de 133.000 en Europa y 4.000 en España, lo que supone 4 veces más que las víctimas por accidentes de tráfico.
Además, es un problema en aumento. De hecho, la Organización Mundial de la Salud (OMS) prevé que, para 2050, sean diez millones de personas las que mueran anualmente por esta causa. Y los expertos hablan incluso de pandemia silenciosa , dada su relación con otra, la del coronavirus, durante la que se ha observado un incremento en el uso de antibióticos por diferentes motivos. «Si no hacemos nada ahora, en 2050 tendremos un problema importante», ha advertido Estapé.
De hecho, el experto ha señalado que, según algunos estudios, hasta el 70 por ciento de los pacientes hospitalizados con COVID-19 al principio de la pandemia recibía antibióticos. «Pero cuando se analizaba la realidad, solo el 6-7 por ciento los necesitaban», ha detallado Estapé.
Tal y como ha explicado el director médico de Enfermedades Infecciosas de MSD España, Manuel Cotarelo, la OMS ya estimó en 2016 que morirán unas 10 millones de personas por motivos directos relacionados con las infecciones por microorganismos resistentes si no se actúa. «Es decir, 30 personas cada 90 segundos», ha detallado.
Al respecto, el doctor Jordi Vila Estapé ha insistido en la necesidad de concienciar a la población sobre el buen uso de los antibióticos, que «solo sirven para tratar infecciones bacterianas». En este punto, ha detallado los datos de una encuesta del Eurobarómetro que muestran que casi la mitad de los europeos piensa que se pueden utilizar contra resfriados.
Esta situación, según el experto, es peor aún en los países mediterráneos como España, Portugal, Grecia o Italia, donde «se abusa del consumo de antibióticos por parte de la población», aunque no hay diferencias con otros países europeos a nivel hospitalario. «Tenemos que incidir en que la gente no haga autotratamiento con los antibióticos», ha apuntado.
A través de un vídeo, el doctor Bruno González-Zorn, director de la Antimicrobial Resistance Unit de la Universidad Complutense de Madrid y asesor de la OMS contra la resistencia a los antibióticos, también ha instado a realizar un «buen uso» de los antibióticos, principalmente en el mundo animal.
El consumo de antibióticos ha bajado un 25,5 por ciento en humanos y un 62,5 por ciento en animales desde 2014, el año en el que se puso en marcha el Plan Nacional frente a la Resistencia a los Antibióticos (PRAN).
FACTORES QUE FOMENTAN LA RESISTENCIA A LOS ANTIBIÓTICOS
Según el especialista, hay varios mecanismos por los que están aumentando las resistencias a los antibióticos, aunque el principal factor es su «mal uso».
En primer lugar, ha señalado al consumo globalizado: «Hoy me puedo comer unas cerezas que se cultivaron en Chile hace una semana. Los alimentos podrían ser una vía de diseminación de estas bacterias multirresistentes».
El segundo, y el «más importante», son los viajes internacionales, sobre todo a países de desarrollo. «Según un estudio, una de cada dos personas que viaja a India vuelve con una bacteria resistente en su tracto intestinal. Si esta bacteria causa una infección del tracto urinario será difícil tratarla, porque está generada por una bacteria multirresistente», ha alertado.
Asimismo, Estapé ha indicado que hasta una de cada cuatro personas que conviven con personas que cuentan en su organismo con bacterias resistentes a los antibióticos las acaban teniendo ellos mismos, principalmente en el ámbito del hogar.
SE NECESITAN NUEVOS ANTIBIÓTICOS
Por todas estas razones, ha reivindicado la importancia de, junto a utilizar mejor los antibióticos, investigar nuevos antibióticos que superen estas resistencia. «Está claro que tenemos un problema de diseño de nuevos antibióticos. En los últimos dos años no ha aparecido ninguno en el mercado ninguno que no esté derivado de otro que ya teníamos», ha lamentado.
Como nota positiva, ha indicado que cada vez hay una «mayor concienciación del problema» entre los organismos internacionales como la OMS y la industria farmacéutica. «Creo que las compañías están volviendo a apostar por diseñar nuevos antibióticos, que son necesarios», ha celebrado.
Al hilo, el director médico de Enfermedades Infecciosas de MSD España ha puesto en valor la importancia de la colaboración público-privada en este aspecto. «Se necesitan colaboraciones con la industria farmacéutica para poder llevar a cabo el desarrollo a gran escala de nuevos antibióticos. Ya hay iniciativas a nivel mundial para que no nos quedemos en el futuro sin antibióticos críticos», ha resaltado.
En el marco de la rueda de prensa también se ha presentado la campaña Hagamos un buen uso de los antibióticos. Comparte el mensaje, súmate , coincidente con la Semana Mundial de Concienciación sobre el Uso de los Antibióticos.
La iniciativa, liderada por MSD, cuenta con el apoyo de la Sociedad Española de Medicina Intensiva, Crítica y Unidades Coronarias (SEMICyUC); la Sociedad Española de Quimoterapia (SEQ); la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC); y la Plataforma de Organizaciones de Pacientes (POP).