World Vision condena los ataques contra casi una decena de campamentos de deslazados en noroeste de Siria
La ONG World Vision ha condenado este lunes los ataques perpetrados por las fuerzas del Gobierno sirio contra varios campos de desplazados en la provincia de Idlib, en el noroeste del país, y que se han saldado con al menos nueve muertos y decenas de heridos.
En un comunicado, la organización ha indicado que entre las víctimas mortales hay una mujer y dos niños y ha lamentado la «trágica pérdida de vidas» a causa de los bombardeos.
Así, ha señalado que la zona afectada incluye más de una veintena de campamentos que cuentan con el apoyo de diversas ONG. «Las últimas informaciones recibidas por nuestros equipos sobre el terreno apuntan a que al menos 75 personas han resultado heridas, 63 tiendas han sido destruidas y más de 2.100 familias se han visto obligadas a desplazarse debido a la violencia», recoge el texto.
World Vision ha alertado de que las condiciones son ya de por sí «extremadamente duras en campamentos superpoblados donde las familias sirias siguen luchando por encontrar un refugio decente, acceso a agua potable y formas de calentarse de cara al invierno».
En este sentido, ha destacado que los centros educativos se encontraban cerrados en el momento de los ataques, por lo que ningún niño resultó herido en estos centros.
Johan Mooij, director de la respuesta humanitaria de la ONG en Siria, ha aseverado que los desplazados que viven en tiendas de campaña «no deberían ser objetivo de nada más que de asistencia humanitaria».
Así, ha hecho un llamamiento a todas las partes implicadas en el conflicto para que «cumplan sus responsabilidades en virtud del Derecho Internacional y pongan fin a la violencia contra la población civil».
«Con demasiada frecuencia, estos ataques indiscriminados tienen como resultado la pérdida de la educación para los niños y las niñas, graves lesiones para las víctimas y la pérdida de vidas», ha lamentado.
LA OPOSICIÓN SIRIA ALERTA DE LAS CONSECUENCIAS
La Coalición Nacional para las Fuerzas de la Oposición y la Revolución Siria ha alertado por su parte de las consecuencias a la escalada de violencia contra civiles en el país.
«El régimen de Bashar al Assad ha llevado a cabo nuevos ataques sanguinarios contra los civiles desplazados mediante el bombardeo de campamentos en la zona rural del oeste de Idlib», han advertido en una breve nota.
Asimismo, ha advertido que se trata de un «ataque que constituye un crimen de guerra» y ha pedido una reunió urgente del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas para tomar «medidas punitivas contra los perpetradores de estos ataques» contra la población siria.