ANECPLA denuncia que el «vacío legal» de la gestión del aire en interiores expone a «graves» problemas de salud
La Asociación Nacional de Empresas de Sanidad Ambiental (ANECPLA) ha denunciado, en una jornada técnica sobre Calidad de Aire Interior celebrada ayer en la Universidad de Nebrija en Madrid, el «vacío legal» de la gestión del aire en interiores expone a los ciudadanos a «graves» problemas de salud.
Y es que, España no cuenta con una legislación que regule la calidad del aire interior. «Este vacío resulta aún más flagrante a la luz de la evidencia demostrada en este ámbito después de lo que hemos vivido con la pandemia de COVID-19, que ha puesto sobre la mesa la vital importancia que tiene este aspecto tan ninguneado en el pasado y aún en el presente a pesar de lo que hemos sufrido durante los dos últimos años», ha dicho el presidente de ANECPLA, Sergio Monge.
En este sentido, el experto del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII), Saúl García, ha comentado que en Europa, mientras unos países se sitúan a la vanguardia en el estudio de este ámbito y su regulación, como es el caso de nuestro vecino francés, en España se está «en el último vagón de cola» en este sentido.
Además, desde ANECPLA se ha recalcado en la jornada que hay un sector de la población que pasa el cien por cien de su tiempo en interiores como es el caso de los pacientes ingresados en hospitales o ancianos que viven en residencias. «La pandemia de COVID-19 hizo saltar todas las alarmas en su momento a partir de que se confirmó su transmisión a través de partículas suspendidas en el aire, por eso nos resulta inconcebible que la maquinaria de las Administraciones Públicas no se haya puesto en marcha para regular este aspecto de la Sanidad Ambiental que pone en riesgo cada día a millones de españoles», ha denunciado el director general de ANECPLA, Jorge Galván.
Mientras tanto, ANECPLA ha hecho un llamamiento a tener en cuenta otras normativas existentes que, aunque no vinculantes como determinadas normas ISO o los valores establecidos desde la Organización Mundial de la Salud (OMS), sí pueden constituir un referente a tener en cuenta para comenzar a actuar activamente sobre la calidad de aire interior, especialmente en espacios especialmente vulnerables como, por ejemplo, hospitales, centros de salud o residencias.
«Es urgente que la calidad de aire interior se coloque como una prioridad en la agenda de las Administraciones Públicas, lo contrario está llamado a provocar seguras nefastas consecuencias sobre la salud pública en España», han zanjado desde la organización.