Albares reitera al enviado de la ONU para el Sáhara el apoyo de España a su labor
El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, se ha reunido este martes con el enviado de la ONU para el Sáhara, Staffan de Mistura, quien se encuentra en Madrid, y al que le ha reiterado el apoyo de España a su labor.
En esta reunión, Albares le ha trasladado el respaldo manifestado por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, desde la tribuna de la Asamblea General de las Naciones, el pasado día 22 de septiembre en Nueva York y le ha reiterado la importancia de la labor que está realizando, según han informado fuentes del Ministerio.
Este es el cuarto encuentro entre ambos desde que el diplomático italo-sueco fue designado para el cargo hace ahora un año y es la segunda ocasión en la que visita Madrid en el marco de sus esfuerzos para encontrar una solución al conflicto del Sáhara Occidental, tras la efectuada en enero pasado.
La última vez que Albares se entrevistó con De Mistura fue el pasado 21 de marzo, en Bruselas, tan solo tres días después de que se conociera la carta que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, le envió al rey Mohamed VI en la que la que sostenía que el plan de autonomía marroquí para el Sáhara es «la base más sólida, seria y creíble» para resolver el conflicto.
La misiva allanó el camino a una nueva etapa en la relación con Marruecos, después de un año de crisis diplomática, pero fue duramente criticada tanto por el Frente Polisario como por Argelia, su principal respaldo a nivel internacional, que lo consideraron una traición a los saharauis por parte de la antigua potencia colonial.
Albares ha reiterado en todo momento el respaldo del Gobierno español a la labor emprendida por De Mistura, incidiendo en que hay que encontrar una solución mutuamente aceptable para las partes a un conflicto que dura ya casi cinco décadas y podría prologarse otras cinco décadas más.
El encuentro se produce tras las recientes visitas realizadas en las últimas semanas por De Mistura a Marruecos –donde no se desplazó a El Aaiún como estaba inicialmente previsto–, así como a Argelia, donde visitó los campos de refugiados saharauis en Tinduf, y a Mauritania.