El cónsul de Japón en la ciudad rusa de Vladivostok, Motoki Tatsunori, ha salido de Rusia dos días después de haber sido detenido tras ser acusado de acciones ilegales acometidas en territorio ruso.

Según ha explicado una fuente policial a la agencia rusa TASS, el cónsul japonés ha emprendido un vuelo hacia la capital de Rusia, Moscú, para dirigirse más tarde hacia el territorio nipón.

Tatsunori, de hecho, ha abandonado el país en el plazo máximo que Rusia le había concedido para salir de Rusia, que eran dos días.

En un comunicado, las autoridades rusas explicaron el domingo que el cónsul nipón había sido arrestado tras ser cogido «con las manos en la masa al recibir una compensación monetaria a cambio de información sobre aspectos de la cooperación de Rusia con países de Asia y el Pacífico».

Asimismo, lo acusaron de entregar información sobre el «impacto de las sanciones impuestas por la comunidad internacional», especialmente en la región de Primorski Krai, cuya capital es Vladivostok.

Posteriormente, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia convocó al ministro consejero de la Embajada japonesa para expresar una severa advertencia y entregar la nota correspondiente. El diplomático japonés detenido, Motoki Tatsunori, fue declarado persona non grata y se le dio 48 horas para abandonar el territorio de Rusia.

La parte japonesa, sin embargo, insiste en que Tatsunori no ha hecho nada ilegal, expresando su protesta y exigiendo disculpas.