ACS gana dos contratos de 800 millones de euros en Los Ángeles con su filial Flatiron
Flatiron, una de las filiales de ACS en Estados Unidos, se ha adjudicado dos nuevos contratos en Los Ángeles (California) valorados en 800 millones de euros, orientados a la mejora del transporte en las carreteras que rodean a este urbe de casi 19 millones de habitantes, incluida su área metropolitana.
La compañía, en joint venture con la firma local Myers & Sons Construction, se ha impuesto en el contrato para construir nuevos carriles rápidos de alta ocupación en la carretera I-105 con un coste estimado de 507 millones de euros, según ha informado en un comunicado.
Los autobuses públicos y los coches en los que viajen más de una persona podrán usar estos nuevos carriles sin pagar un peaje. El objetivo es mejorar la seguridad y la calidad de los viajes, dando opción a todos los usuarios.
Por otra parte, en otra joint venture con las empresas Stacy and Witbeck y Modern Railway Systems, Flatiron será la encargada de desarrollar una nueva línea de autobús rápido, también en Los Ángeles y por un importe de 300 millones de euros.
Este proyecto consiste en la construcción de carriles separados para una nueva línea del llamado G-Line Bus Rapid, que permita reducir los tiempos de viaje en el autobús, al mismo tiempo que mejora la seguridad evitando que coches y autobuses circulen por el mismo carril.
«Creemos que la colaboración con LA Metro –la empresa pública encargada del transporte– y los socios constructores en estos proyectos mejorará el transporte en el área metropolitana de la ciudad. Además, brindarán una oportunidad para la contratación local y de pequeñas empresas de la zona», ha señalado la empresa.