La actividad manufacturera de España se contrae por primera vez desde mayo de 2022, según PMI
Las fábricas de la zona euro registran su peor dato en 25 meses
La actividad manufacturera de España registró se deterioró el pasado mes de julio como consecuencia del impacto sobre la demanda de la inflación y de la incertidumbre económica, según refleja el índice de gestores de compra (PMI), que bajó hasta los 48,7 puntos, desde los 52,6 del mes anterior, situándose por primera vez desde mayo de 2020 por debajo del umbral de los 50 puntos que separa el crecimiento de la contracción.
«La alta inflación, junto con la considerable incertidumbreeconómica a corto plazo actualmente existente en España y en todo el mundo, perjudicaron intensamente a la economía manufacturera en julio», señaló Paul Smith, economista de S&P Global Market Intelligence, advirtiendo de que la perspectiva a corto plazo para la producción es claramente a la baja.
«Dicha tendencia bajista también se observa en las expectativas de las empresas, que se desplomaron a un nivel similar al observado en marzo, cuando empezó la escalada del conflicto en Ucrania», añadió, subrayando que las empresas están adoptando posiciones defensivas de cara a una potencial recesión económica en los próximos meses.
En el caso del conjunto de la eurozona, la actividad fabril también se ralentizó en julio, cuando el PMI cayó a 49,8 puntos, frente a los 52,1 de junio, su peor lectura de los últimos 25 meses.
«La crisis energética se suma a los riesgos de que no solo una demanda más débil y la reducción de existencias hagan que la producción manufacturera disminuya a un ritmo mayor en los próximos meses, sino que la reducción del suministro de energía actuará como un lastre adicional para el sector», advirtió Chris Williamson, economista jefe de S&P Global Market Intelligence.