Una dieta saludable tras el diagnóstico de cáncer de cabeza y cuello puede aumentar la supervivencia
Los pacientes con carcinoma de células escamosas de la cabeza o el cuello pueden tener hasta un 93 por ciento menos de probabilidades de morir por cualquier causa durante los primeros tres años después del diagnóstico si consumen una dieta saludable, según un estudio realizado por expertos de la Universidad de Michigan (Estados Unidos).
«Observamos seis índices de calidad de la dieta diferentes y comparamos los resultados de los pacientes. El objetivo era evaluar la adherencia a diferentes patrones de alimentación y explorar cómo la dieta se relacionaba con la mortalidad específica por cáncer y por todas las causas», han dicho los expertos.
Para el plan general bajo en carbohidratos, los investigadores usaron un índice que calificaba las dietas de los pacientes de 0 a 30, y las puntuaciones más altas reflejaban un menor consumo de carbohidratos y mayores cantidades de grasas y proteínas. Para las versiones de origen animal y vegetal, se utilizaron en la puntuación los porcentajes de grasa y proteína obtenidos de fuentes animales o vegetales.
Durante el período estudiado, se informaron 93 muertes de pacientes por todas las causas, incluidas 74 muertes relacionadas con el cáncer. «Cuando probamos todos estos índices, lo que encontramos fue que solo uno de ellos, el AHEI-2010, tenía una relación muy fuerte con el resultado de la mortalidad por todas las causas. Cada aumento de 11 puntos en el cumplimiento del AHEI-2010 se asoció con una disminución del 60 por ciento en el riesgo de muerte de los pacientes», han explicado los investigadores.
Dos de las dietas bajas en carbohidratos mostraron efectos modestos en las tasas de mortalidad de los pacientes. Las puntuaciones más altas en los índices bajos en carbohidratos generales y basados en plantas se asociaron con disminuciones del 59 por ciento y 71 por ciento, respectivamente, en la mortalidad por todas las causas, encontraron los investigadores. Sin embargo, estos hallazgos no alcanzaron el umbral de significación estadística.
«Hemos demostrado con el trabajo que hacemos en nuestro laboratorio que la nutrición está íntimamente ligada a varios resultados en los cánceres de cabeza y cuello, no solo la mortalidad sino también los síntomas que presentarán los pacientes. Esta es otra prueba de que debemos examinar la nutrición a medida que los pacientes pasan por el proceso de tratamiento y durante el curso de la enfermedad», han zanjado los investigadores.