FNETH y Apoyo Positivo lanzan la campaña Un futuro sin hepatitis para pedir el fin de la enfermedad
Con motivo del Día Mundial de las Hepatitis, que se celebra este jueves, la Federación Nacional de Enfermos y Trasplantados Hepáticos (FNETH) y Apoyo Positivo, en colaboración con la Asociación Española para el Estudio del Hígado (AEEH) y la Alianza para la Eliminación de las Hepatitis Víricas en España (AEHVE), han lanzado la campaña Un futuro sin hepatitis para concienciar sobre la importancia de prevenir, diagnosticar y tratar de la enfermedad a todas las personas.
«Con esta iniciativa pretendemos sensibilizar, concienciar e informar a la sociedad sobre las diferentes hepatitis virales y la posibilidad de erradicarlas o controlarlas como problema de salud pública», señala el CEO de Apoyo Positivo, Jorge Garrido. La campaña se compone de videos y creatividades que se publicarán en las redes sociales de FNETH, Apoyo Positivo, AEEH y AEHVE.
Carla Antonelli, Pablo Barrios y Carlos Barea son algunas de las caras conocidas que protagonizan vídeos sobre prevención, diagnóstico, tratamiento y vacunación de las distintas hepatitis. La campaña cuenta además con el apoyo de Abbvie y Gilead.
Asimismo, la campaña denuncia que no se están alcanzando las metas para lograr el objetivo de combatir y eliminar las hepatitis B y C en el año 2030, acordado por la Organización Mundial de la Salud (OMS). «Los datos disponibles indican que la mayoría de los países no están en camino de cumplir con este objetivo de la OMS de reducir la incidencia y mortalidad relacionada con las hepatitis B y C», explica la presidenta de FNETH, Eva Pérez Bech.
FNETH y Apoyo Positivo han enviado una carta conjunta explicativa de la situación, las carencias y los pasos clave a dar, junto con informes que avalan sus propuestas, a los responsables de las diferentes administraciones de todo el territorio nacional.
En este sentido, consideran necesario garantizar la vacunación infantil completa de Hepatitis B, y en aquellos casos que no fueron vacunados o requieren un recuerdo; proporcionar material preventivo idóneo, especialmente entre las personas que se inyectan drogas, así como garantizar el acceso a terapias de sustitución de las sustancias a las que son dependientes.
También inciden en la importancia de reducir en un 90 por ciento el número de infecciones crónicas por hepatitis víricas; de diagnosticar y dar acceso a tratamiento al menos al 75 por ciento de las personas afectadas por hepatitis B y C, logrando la supresión viral, en el caso de la B, y la cura, en el caso de la C, en al menos un 90 por ciento.
Por último, en esta campaña se recuerda que la microeliminación es la estrategia más eficaz para lograr la eliminación global de este virus en toda la población.