Lastra deja Ferraz nueve meses después de perder la portavocía del Congreso y tras la debacle en Andalucía
Su salida abre la puerta a más cambios en la cúpula socialista tras las tensiones internas de los últimos meses
La vicesecretaria del PSOE, Adriana Lastra, ha dimitido hoy de su cargo en la dirección nacional del PSOE alegando motivos personales y una baja laboral que previsiblemente se prolongará en el tiempo. La salida se produce nueve meses después de que dejase de ser portavoz del PSOE en el Congreso y tras la derrota socialista en las elecciones andaluzas hace unas semanas.
Lastra ha explicado en un comunicado -sin el logo oficial del partido- que transmitió su decisión de dejar el cargo al secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, «hace días» por cambios recientes en su vida personal que le exigen «tranquilidad y reposo» y le han obligado a tomar una baja laboral «que se va a prolongar aún un tiempo». La también diputada en el Congreso, ya estuvo ausente en la Cámara la semana pasada durante el Debate sobre el estado de la Nación debido a una baja por maternidad, según explicaron fuentes del PSOE.
La salida de Lastra abre la puerta a que se produzcan más cambios en la cúpula socialista, ya que Sánchez podría dejar el puesto vacante o nombrar un nuevo número dos y también ejecutar más cambios en los puestos de responsabilidad del partido.
En los últimos meses ha existido tensión entre Lastra y el número 3 , Santos Cerdán, por los ámbitos de poder de cada uno. La situación obligó a intervenir al propio Sánchez, que hace dos meses llegó a reunir a los dos dirigentes para que aparcasen sus cuitas internas, según indicaron fuentes del partido a Europa Press.
Por tanto, el escenario aún permanece abierto, con el horizonte de fondo de las elecciones autonómicas y municipales que se celebran dentro de un año y las próximas generales a finales de 2023. El PSOE tiene la necesidad de fortalecerse y conseguir darle la vuelta a un ciclo electoral desfavorable tras las últimas derrotas en elecciones autonómicas.
REELEGIDA EN EL 40 CONGRESO
De este modo, Adriana Lastra abandona la cúpula de Ferraz, tras haber sido ratificada como número dos del PSOE en el 40 Congreso que se celebró en Valencia el pasado mes de octubre. Sin embargo, en esa misma cita se confirmó su salida como portavoz parlamentaria en el Congreso de los Diputados, ya que hasta la fecha compaginaba los dos cargos.
En ese momento Lastra perdió uno de los puestos de más relevancia y exposición pública en el PSOE, aunque desde Ferraz se trasladó que se centraba en su función orgánica en el partido, donde ejercía como mano derecha de Sánchez.
CAMBIOS EN FERRAZ
Su salida se produce además, un mes después de la derrota del PSOE en las elecciones autonómicas en Andalucía el 19 de junio, donde empeoraron su peor resultado histórico al bajar hasta los 30 escaños y vieron como el PP se alzaba con su primera mayoría absoluta en esta comunidad.
Esta derrota en las urnas, sumada a las sufridas en las anteriores convocatorias electorales, en Castilla y León y Madrid, pusieron el foco en un posible relevo tanto en el Gobierno como en el PSOE en la última semana de junio, que finalmente no se produjo.
En ese momento –el 25 de junio– el presidente Sánchez mostró su respaldo a los ministros de su Gobierno y a los miembros de la Comisión Ejecutiva Federal del PSOE al ser preguntado por un posible recambio. Sin embargo, reconoció que si lo fuese a hacer «no lo diría» públicamente.
«Si lo fuese a hacer no lo diría y si le digo que no lo voy a hacer no me creerían», señaló Sánchez entonces, tras ser preguntado sobre si cerraba la puerta a una crisis de Gobierno y a una renovación en la cúpula del PSOE.
CON SÁNCHEZ DESDE EL PRINCIPIO
Adriana Lastra ha sido una de las colaboradoras más estrechas del también presidente del Gobierno, sobre todo desde su segunda etapa al frente del partido tras ganar las primarias en 2017.
Entró en la Ejecutiva Federal de la mano de Sánchez en 2014 como secretaria de Política Municipal. A continuación, en 2016 se produjo el enfrentamiento interno en el PSOE que desembocó en la dimisión de Sánchez como secretario general, el nombramiento de una Gestora para dirigir el partido de forma temporal y la convocatoria de unas primarias.
En ese momento crítico para Sánchez, Lastra estuvo de su lado y expresó con contundencia su rechazo a permitir la investidura de Mariano Rajoy (PP). Ya en 2017, tras la victoria de Pedro Sánchez en las primarias del PSOE, la socialista asturiana fue nombrada vicesecretaria general y un año después, ya con el PSOE en La Moncloa, designada como portavoz parlamentaria en el Congreso.