WiZink obtiene un beneficio de 332.000 euros hasta marzo, un 96% menos, tras cerrar 2021 en pérdidas
WiZink obtuvo un resultado neto de 332.000 euros en el primer trimestre del año, un 96% menos que en el mismo periodo del 2021, si bien ha conseguido retornar a beneficios tras cerrar el ejercicio pasado con pérdidas de 312,08 millones de euros, según las cuentas remitidas al Banco de España.
El beneficio ordinario de la entidad entre enero y marzo ascendió a 17 millones de euros.
El director de Finanzas Corporativas y Estrategia de la entidad, Francisco Javier Cobo, ha explicado a Europa Press que la vuelta a las ganancias se explica por la diversificación del negocio que está realizando el banco en el marco de su plan estratégico, así como por la gestión activa del riesgo crediticio y el control de costes.
Concretramente, el banco continuó en el primer trimestre manteniendo su foco en mejorar la eficiencia, lo que se tradujo en una reducción de sus gastos de explotación recurrentes en un 13% frente al año anterior, hasta los 52 millones de euros.
Además, las medidas de control del riesgo aplicadas por el banco durante la pandemia contribuyeron a reducir las pérdidas de crédito (activos financieros a coste amortizado), que disminuyeron un 29%, pasando de 42 millones de euros en el primer trimestre de 2021 a 30 millones de euros en el mismo trimestre de 2022.
Estas medidas de control de riesgo llevaron a un menor crecimiento del saldo crediticio, lo que se tradujo en una reducción del 22% del margen bruto, a 99 millones de euros, mientras que los ingresos por comisiones descendieron un 5,5%, hasta los 20,2 millones de euros.
No obstante, el banco destaca la vuelta a la normalidad de algunos de sus indicadores, como las compras a través de sus tarjetas, con niveles preCovid tanto en España como en Portugal, o la captación de nuevos clientes de tarjetas, que ha aumentado más de 2,5 veces en el último año.
WiZink espera que esta recuperación de la actividad, junto con el crecimiento generado por sus nuevos negocios –como el de préstamos personales, la financiación en punto de venta a través de su filial Aplázame o la financiación al sector del automóvil a través de Lendrock– la sitúen en una «buena posición» para incrementar la generación futura de ingresos.
Cabe recordar que en el primer trimestre, WiZink acometió una ampliación de capital de 250 millones de euros a través de una inversión respaldada por Värde Partnerts y otros inversores internacionales, dirigida a gestionar el impacto potencial de las reclamaciones por tarjetas revolving y reforzar la implementación de su plan estratégico.
Tras haber completado con éxito esta ampliación, la entidad ha reforzado «de manera prudente» sus provisiones relacionadas con futuros litigios por las revolving con cargo a las cuentas de 2021. En este sentido, el banco ha ajustado a valor razonable sus activos fiscales diferidos y, como resultado, las pérdidas contables se situaron en 312 millones a cierre de 2021. Excluyendo las provisiones realizadas en el ejercicio, la entidad habría ganado unos 170 millones de euros antes de impuestos en 2021.
Asimismo, a cierre de marzo, la ratio de capital total de WiZink se situó en el 16,2%, mientras que la ratio de créditos frente a depósitos era del 91%, al contar con 3.100 millones de euros en depósitos.
«El regreso a beneficios refleja el avance significativo que se ha realizado en nuestro plan estratégico para diversificar y hacer crecer nuestro negocio, con foco continuado en la gestión del riesgo y en la eficiencia de costes. Ya estamos observando una fuerte recuperación de la actividad de tarjetas y un crecimiento significativo en nuestros nuevos negocios, por lo que prevemos seguirán mejorando los resultados del banco en el futuro a medio plazo», ha resaltado Cobo.