Sánchez defiende que la obesidad infantil es «un asunto de Estado»: «España tiene un urgente problema que resolver»
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha defendido que la obesidad infantil es «un asunto de Estado» debido a las altas tasas de prevalencia de esta enfermedad en niños, por lo que considera que España «tiene un urgente problema que resolver».
Así lo ha resaltado Sánchez durante el acto de presentación del Plan Estratégico Nacional para la Reducción de la Obesidad Infantil, que se ha presentado este viernes en el Polideportivo Juan de la Cierva de Getafe (Madrid).
La Organización Mundial de la Salud (OMS), a quien el jefe del Ejecutivo ha agradecido su trabajo contra la obesidad y durante la pandemia de COVID-19, califica la obesidad como una «epidemia global». «Traslada la magnitud de la problemática y la urgencia de poner en marcha medidas para poder atajarlo. Es uno de los factores de riesgo más importantes para la salud humana a nivel mundial», ha detallado Sánchez.
El presidente ha señalado al respecto que la obesidad «se ha convertido en uno de los mayores problema sociales y de salud del siglo XII», teniendo en cuenta que el número de niños y adolescentes con sobrepeso en el mundo «supera los 340 millones». «En estas últimas dos décadas se ha duplicado. La velocidad en que va en aumento es aún mayor», ha lamentado.
Al hilo, ha recordado que cuatro de cada diez niños y tres de cada diez adolescentes en España tiene exceso de peso. «Esta situación nace de la desigualdad social que sufrimos por desgracia en nuestro país, exacerbada por la crisis financiera, la pandemia o el alza de los precios por la guerra», ha responsabilizado.
Sánchez ha hecho especial hincapié en la relación entre pobreza y obesidad. «Son especialmente altas las tasas en niños que vienen de hogares de renta muy baja, que tienen el doble de posibilidades de sufrir obesidad. La pobreza se refleja en los indicadores de salud», ha indicado.
Igualmente, también se ha referido al género: «Si bien los niños presentan tasas más altas las niñas, la obesidad en niñas y adolescentes se ha duplicado en los últimos 20 años, una tendencia a la que debemos prestar atención».
Por todo ello, Sánchez ha asegurado que el Plan, que tiene como objetivo reducir el exceso de peso en la infancia en un 25 por ciento y en un 40 por ciento la brecha social asociada, pretende «garantizar uno de los derechos más importantes, el de aquellas personas más vulnerables, que necesitan el compromiso de todos».
«Crecer sanos no siempre es fácil. No se trata solo de voluntad de los niños y las familias, que estoy convencido que la tienen, sino que son muchos los obstáculos que pueden llegar a impedir ese objetivo, como no tener acceso a una alimentación saludable, no contar con espacios para jugar o hacer deporte, o algo tan vital como dormir lo necesario por las noches», ha ejemplificado, a lo que ha añadido que «no dormir las horas adecuadas duplica el riesgo de obesidad en los niños».
Así, el presidente ha remachado que la lucha contra la obesidad infantil «nos incumbe a todos». «No solamente a las familias, sino al conjunto de administraciones. En definitiva, entre todos tenemos que conseguir que los niños y adolescentes tengan las mismas oportunidades de futuro, que sus condiciones de partida no cuenten para lograr una vida plena», ha finalizado.