El sector del autocuidado reclama un marco regulatorio adecuado al escenario pospandemia
El escenario pospandemia, influido por tendencias como el auge del e-commerce, el interés de los consumidores por la sostenibilidad, la digitalización y los retos en la cadena de suministro, requiere de un marco regulatorio mejorado para los medicamentos y productos de autocuidado de la salud.
Así lo ha expresado Birgit Schuhbauer, presidenta de la Asociación Europea del Autocuidado (AESGP), durante la inauguración este miércoles del 58º Encuentro Anual de la asociación.
«Es importante apoyar legislaciones transformadoras que faciliten una sociedad más verde, digital e inclusiva. Pero, sobre todo, tenemos que avanzar hacia una armonización de las legislaciones nacionales, hace falta más disciplina en la implementación de la regulación europea a nivel nacional», ha recalcado Schuhbauer.
La presidenta de la AESGP ha recordado en su intervención el gran impacto económico que tiene el autocuidado en Europa, donde cada año se consigue un ahorro de 34.000 millones de euros en el gasto sanitario gracias al uso de estos productos. «Este ahorro podría incrementarse en otros 17.000 millones más anuales si tuviésemos el marco regulatorio adecuado implementado en todos los países de la UE», ha subrayado.
En este sentido, la presidenta ha reclamado una revisión de la regulación de los cambios de estatus desde medicamentos de prescripción a medicamento sin receta, que agilice y facilite los procedimientos y permita a la industria farmacéutica aportar más innovación al sector del autocuidado.
La necesidad de una revisión del marco regulatorio es compartida también por los representantes de las agencias de evaluación de medicamentos. Así lo ha expresado César Hernández, jefe del Departamento de Medicamentos de Uso Humano de la AEMPS. «Tenemos que hacer la transición hacia una nueva normalidad y probablemente necesitaremos un nuevo perfil de regulador», ha afirmado.
Hernández ha recordado que Europa ha abierto un gran proceso de revisión de su legislación farmacéutica y España va a tener un papel destacado en ese proceso, ya que en el segundo semestre de 2023 asumirá la presidencia del Consejo de la UE. «Tenemos una legislación que debemos revisar para facilitar a los ciudadanos un mayor control de su propia salud», ha añadido.