El Gobierno descarta «falta de suministro» de gas en los próximos meses pese a la amenaza de subida por Argelia

Insiste en que son las empresas las que negocian los contratos y defiende a Argelia como «socio sólido»

El Gobierno se mantiene firme en su postura de que Argelia es un «socio sólido» de España pese a la crisis diplomática abierta por el apoyo al plan de autonomía marroquí para el Sáhara y no cree que en los próximos meses pueda haber «falta de suministro» de gas pese a la amenaza de una subida de los precios del procedente desde este país magrebí.

Eso es lo que sostiene el Ejecutivo en una respuesta parlamentaria a la que ha tenido acceso Europa Press después de que los senadores independientes Ruth Goñi y Emilio Argüeso se interesaran por conocer lo que estaba haciendo el Gobierno después de que el presidente de Sonatrach, la empresa pública argelina, amenazara con subir los precios del gas que se exporta a España.

En ella, reconoce que «históricamente, Argelia ha sido el principal suministrador de gas a España» e incide en que el suministro de gas natural se lleva a cabo mediante «contratos privados de los comercializadores, sin perjuicio de la responsabilidad del Gobierno de garantizar la seguridad de suministro en el marco establecido en lanormativa vigente».

Así las cosas, el Gobierno se remite a las declaraciones sobre la materia realizadas por el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, insistiendo en que «Argelia es un socio sólido, fiable y estratégico, además de un suministrador de gas fiable, que siempre ha cumplido sus contratos».

El Ejecutivo también recuerda que el propio presidente argelino, Abdelmayid Tebune, dijo el pasado 23 de abril que «Argelia no renunciará a su compromiso de suministrar gas a España cualesquiera que sean las circunstancias», pese a que su embajador fue llamado a consultas el pasado 19 de marzo tras conocerse la carta en la que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, trasladaba a Mohamed VI su apoyo al plan de autonomía marroquí para el Sáhara.

Según explica el Gobierno en su respuesta, fechada el 1 de junio, actualmente «el sistema gasista español cuenta con unos niveles de capacidad contratada de gas natural superiores a la de inviernos anteriores en la misma fecha, y se encuentra en una situación mejor que la de otros países del entorno», en referencia a la menor dependencia energética de Rusia en el contexto actual de la invasión de Ucrania.

NO HAY INDICIOS DE FALTA DE SUMINISTRO

Por todo ello, el Ejecutivo reivindica que «con la situación a día de hoy y con las reservas de slots y capacidad ya realizada por los comercializadores, no hay indicios objetivos de una situación de falta de suministro gasista en los próximos meses».

Por otra parte, en otra respuesta parlamentaria fechada el 19 de mayo y en la que senadores del PP se interesaban por el impacto que la eventual subida del precio del gas por parte de Argelia tendrá en los consumidores españoles, el Gobierno se pronuncia en la misma línea.

En este sentido, incide en que «los precios de los aprovisionamientos procedentes de Argelia se ajustan a contratos bilaterales, de carácter privado, firmados por empresas españolas con su contraparte argelina ya que son los comercializadores los responsables de aprovisionarse del gas necesario para suministrar a sus clientes».

Respecto al impacto de una eventual subida, sostiene que para calcularlo «sería necesario tener en cuenta tanto los precios como la evolución de las cantidades importadas provenientes de dicho país».

Cabe recordar que aunque como sostiene el Ejecutivo Argelia ha sido «históricamente» el principal suministrador de gas a España, en los últimos meses la dependencia con respecto a este país, que desde noviembre pasado solo suministra a través del gasoducto Medgaz tras el cierre del Gasoducto Magreb-Europa (GME) que canalizaba el gas a través de Marruecos por parte de Argel.

Así, según los últimos datos publicados por Enagás y correspondientes al mes de abril, Estados Unidos fue el primer suministrador, con el 30,7% del total del gas recibido por España, seguido por Argelia, con el 23,4%, seguida ya de cerca por Nigeria, con el 16,9%.