El 15% del personal sanitario de todo el mundo no se vacuna contra la COVID por ser reacios a la vacuna
Un estudio realizado en 23 países por un equipo multidisciplinar ha revelado que el 15 por ciento de los proveedores de atención médica (médicos, enfermeros y trabajadores comunitarios) dudan de vacunarse contra la COVID-19 y el cuatro por ciento ha asegurado que la rechazan «rotundamente», ya que han aducido dudas en torno a la seguridad y falta de confianza en la distribución equitativa.
La investigación, que se ha publicado en la revista Vaccine , ha encuestado a 23.000 adultos en Brasil, Canadá, China, Ecuador, Francia, Alemania, Ghana, India, Italia, Kenia, México, Nigeria, Perú, Polonia, Rusia, Singapur, Sudáfrica, Corea del Sur, España, Suecia, Turquía, el Reino Unido y los Estados Unidos en junio de 2021. Entre los encuestados, 3295 se identificaron como proveedores de atención médica, como médicos, enfermeras y trabajadores comunitarios de la salud.
De los proveedores de atención médica encuestados, los médicos fueron los que menos dudaron. La vacilación de la vacuna era más probable que ocurriera entre aquellos con ingresos inferiores a la mediana y, en menor grado, de menor edad.
«Estos hallazgos son preocupantes. Dado que la vacilación de los trabajadores de la salud puede influir negativamente en las percepciones de la comunidad, especialmente entre los pacientes y familiares, y puede contribuir a que rechacen o retrasen la adopción de la vacuna COVID-19», ha alertado el investigador Dean El-Mohandes.
Por su parte, el académico principal de la Escuela de Graduados de Salud Pública y Políticas de Salud de la Universidad de la Ciudad de Nueva York (CUNY, por sus siglas en inglés), Jeffrey Lazarus, ha alertado que este tipo de actitudes puede impedir el éxito potencial de las campañas mundiales de vacunación y, a su vez, la capacidad para controlar la pandemia. «La capacitación y las campañas que refuerzan la seguridad de las vacunas, la difusión de datos científicos que respaldan el desarrollo de vacunas, además de información y compromiso claros, consistentes y completos que respaldan la distribución equitativa de vacunas, son estrategias potencialmente útiles para alentar a los profesionales de la salud que dudan en vacunarse», ha sentenciado.