Unos 230 transfronterizos podrán acceder desde medianoche a Ceuta y Melilla, un 5% de los que pasaban antes del Covid
El Gobierno dice que vigilará que no pernocten y quiere primar las contrataciones de desempleados y empresas locales
Las fronteras terrestres de Ceuta y Melilla abrirán la medianoche de este 31 de mayo para alrededor de 230 trabajadores transfronterizos, lo que supone algo más del 5 por ciento con respecto a los trabajadores marroquíes que pasaban con papeles en regla antes del cierre de los pasos fronterizos hace algo más de dos años, coincidiendo con el inicio de la pandemia de Covid-19.
En concreto, los datos de las delegaciones del Gobierno apuntan a que unos 150 trabajadores transfronterizos podrán acceder a Ceuta, frente a los 2.405 registrados legalmente en marzo de 2020, cuando se cerró el paso fronterizo coincidiendo con el inicio de la pandemia (la inmensa mayoría, 2.109, empleadas de hogar). En Melilla, por su parte, se esperan unos 80 trabajadores transfronterizos, cuando hace dos años había unos 1.847 con papeles en regla.
Los transfronterizos son trabajadores marroquíes principalmente del servicio de hogar, la construcción o la fontanería. Acceden a Ceuta y Melilla por contar con un permiso de trabajo pero en teoría sin posibilidad de pernoctar en las ciudades españolas, por lo que deben regresar a su país una vez finalizada la jornada laboral. En los dos años de pandemia muchos no han renovado su documentación o se les ha caducado.
MÁS DE 26.000 ENTRADAS EN CEUTA Y 17.000 EN MELILLA
El Ministerio del Interior fijó mediante una orden de fronteras que los pasos terrestres de El Tarajal, en Ceuta, y de Beni Enzar, en Melilla, reabrieran el pasado 17 de mayo, aunque en una primera fase estaba restringida a ciudadanos de la Unión Europa y con permiso para circular en territorio Schengen.
En estos primeros 15 días, en Ceuta se han registrado 26.929 entradas de ciudadanos y 9.642 vehículos, frente a 42.629 salidas de peatones en dirección a Marruecos y otros 11.994 de vehículos. En Melilla, por su parte, se han producido 17.836 entradas peatonales y 6.931 de vehículos, mientras que las salidas han arrojado las cifras de 17.992 ciudadanos y 15.296 vehículos.
La reapertura gradual de las fronteras terrestres se ha pactado con las autoridades de Marruecos una vez recuperadas las relaciones bilaterales tras el apoyo expresado por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, al plan marroquí sobre el Sáhara Occidental. Quedan pendientes posibles cambios legales sobre visados en las excepciones sobre el tratado de Schengen para provincias limítrofes, así como poner en marcha las aduanas para mercancías y completar las obras de mejora en el vallado en lo que el Ejecutivo llamada «frontera inteligente».
La Delegación del Gobierno en Ceuta ha defendido este lunes el «nuevo modelo de frontera más seguro y con mayores controles». En un comunicado, ha recordado que las personas extracomunitarias que quieran acceder para trabajar necesitarán un permiso y un contrato laboral. Además, ha subrayado que estas autorizaciones no permitirán pernoctar en la ciudad, algo que ya estaba prohibido pero que ahora se detectará «con el nuevo sistema de control fronterizo».
Quienes hace dos años estaban en posesión de un permiso de trabajo en Ceuta y Melilla podrán renovarlos con un procedimiento simplificado sin necesidad de iniciar una nueva solicitud. No obstante, las nuevas peticiones para el régimen especial del servicio doméstico, por ejemplo, tendrán «requisitos reforzados de cara a favorecer la contratación de empleados y empresas locales».
En la práctica esto supone que, en adelante, cualquier empleador que quiera contratar a un transfronterizo antes tendrá que acreditar mediante un certificación emitido por el Servicio de Empleo Público Estatal (SEPE) la insuficiencia de esa mano de obra entre los ciudadanos locales que formen parte de la bolsa de desempleados.
AUTORIZACIÓN POR UN DÍA
Las medidas para transfronterizos se activarán este martes a las 00.00 horas para aquellos que tengan en vigor la Tarjeta de Identidad de Extranjeros (TIE) o un visado especial para Ceuta y Melilla. La posibilidad de acceder en horario diurno a las ciudades autónomas por sus fronteras terrestres se abrió hace dos semanas a los nacionales y residentes en la UE o con permiso para moverse por todo el espacio Schengen.
Los titulares de visados de validez territorial limitada para las ciudades autónomas solo estarán autorizados a permanecer en las ciudades españolas un día con el fin de realizar la expedición de su documentación en la Oficina de Extranjería, con la obligación de dormir en su país una vez realizados los trámites burocráticos.
El acceso estará condicionado también para este colectivo a la presentación de pasaporte en vigor y certificado de vacunación completa contra la COVID-19 o pruebas recientes de no infección.
El proceso de reapertura «gradual y progresiva» de las fronteras terrestres entre España y Marruecos no registrará novedades hasta el 15 de junio, cuando el Ministerio del Interior deberá aclarar si restablecerá la aplicación de la excepción que en el Tratado de Schengen permitía hasta hace 26 meses la entrada en Ceuta y Melilla sin visado de los residentes en las provincias de Tetuán y Nador.
El Gobierno de Ceuta que preside Juan Vivas (PP) aboga por eliminarlo, en el marco del plan para ambas ciudades que el Ejecutivo central ha encargado a Tragsa con vistas a «visibilizar los límites de la frontera sur de la UE».
La frontera marítima ya se reabrió en paralelo al encuentro del presidente Pedro Sánchez y el rey Mohamed VI, mientras se ultiman los preparativos para retomar la Operación Paso del Estrecho (OPE).
Quedan pendientes cuestiones como instalar la aduana de Melilla y abrir una en Ceuta para regular el tránsito de mercancías y combatir el contrabando, además de posibles modificaciones legales para exigir visados como condición de acceso, sin excepciones para las provincias limítrofes. También se barajaba introducir cambios en la ley de asilo.