MSF denuncia las peligrosas rutas del Darién y exige seguridad y asistencia para las víctimas sexuales
La ONG Médicos Sin Fronteras (MSF) ha vuelto a denunciar este viernes las penosas y peligrosas condiciones en las que se ven atrapados miles de migrantes que atraviesan el llamado Tapón del Darién, una peligrosa y frondosa selva que une el sur con el centro del continente americano, y ha exigido a las autoridades rutas seguras y asistencia a las víctimas de violencia sexual.
MSF ha alertado de que las condiciones y las instalaciones para recibir a los migrantes que logran cruzar desde Colombia a la provincia panameña de Darién «se están deteriorando». La Estación de Recepción Migratoria (ERM) de San Vicente «es testigo de las enormes carencias en protección, atención médica o servicios básicos, entre otras, a las que se enfrentan las personas migrantes».
De media llegan diariamente 300 migrantes a este lugar y «las condiciones para la recepción de migrantes son insuficientes», lamenta la coordinadora de MSF en Panamá Rabia Ben Ali.
«Cada día cientos de personas llegan a Canaán Membrillo, la primera población que encuentran en Panamá tras cruzar el Darién, donde no reciben atención médica, y luego son llevados a San Vicente, en donde difícilmente encuentran condiciones adecuadas para la atención según estándares internacionales», denuncia.
«Los baños son lo peor. Siempre están sucios. Las duchas no sirven y aquí muchas personas las usan para hacer sus necesidades porque no aguantan el olor», relata un migrante haitiano que utiliza el pseudónimo de François , quien lamenta no poder salir por no disponer de los 40 dólares que piden para coger un bus a Costa Rica.
A diferencia de 2021, cuando los migrantes llegaban al poblado de Bajo Chiquito, donde MSF y el Ministerio de Salud de Panamá pudieron operar para luego trasladar a los migrantes a los ERM de Lajas Blancas y San Vicente, este año la puerta de entrada al país para la mayoría es la zona de Canaán Membrillo.
«Allí, las mujeres víctimas de violencia sexual no reciben ningún tipo de atención, como tampoco otros pacientes que sufren problemas médicos graves. Cuando llegan muchas veces las complicaciones médicas se han agudizado y el tiempo para que un tratamiento preventivo sea efectivo en casos de violencia sexual es insuficiente», cuenta MSF.
VIOLENCIA SEXUAL
MSF denuncia que en las últimas semanas, el número de víctimas de casos de violencia sexual que no han recibido tratamiento oportuno en las primeras 72 horas después del ataque ha aumentado, por lo que la ONG ha demandado a las autoridades panameñas que pongan en marcha los mecanismos necesarios para solucionarlo.
«Nos dejaron sin ropa, comida, dinero, se llevaron los móviles. Nos dejaron como animales a merced de la jungla. Luego separaron a las mujeres, sin importar su edad o si tenían hijos. Los hombres armados metieron sus dedos en sus partes íntimas para ver si estaban escondiendo dinero», relata John, migrante sudafricano.
Por su parte, Gabriela, una venezolana de 40 años, advierte a quienes quieran cruzar que no lo hagan, «que hay riesgos de violación, secuestro y robo. Hay peligro de muerte». Cuenta que a ella le robaron y que les amenazaron con violar a las mujeres del grupo si no cumplían con las órdenes. No hay piedad. Ahí la vida no vale nada», señala.
MSF insiste en la necesidad de mejorar las instalaciones de San Vicente pues su mal estado contribuye también ha aumentar la experiencia traumática de las personas que logran llegar hasta allí. Las pésimas condiciones son responsables de la mayoría de las patologías, como enfermedades de la piel, dolores musculares, diarreas, infecciones respiratorias y del sistema digestivo.
Los equipos médicos han atendido también a personas con crisis de ansiedad, estrés agudo, episodios depresivos, o reacciones ansiosas, fruto de las malas experiencias sufridas durante el paso por la selva.
AUMENTO DEL FLUJO MIGRATORIO DURANTE LA PRIMAVERA
Si bien en enero y febrero se presentó una reducción en el flujo de personas, en marzo y abril ha incrementado, lo mismo que los casos de robos y violencia sexual. En 2022, desde enero hasta la primera semana de mayo, MSF ha atendido 89 casos de violencia sexual ocurridos durante la travesía por el Darién. En 2021 –abril a diciembre– fueron 328 los casos atendidos.
Por ello, MSF insiste a las autoridades en facilitar rutas seguras, además de atención médica y de urgencia para todas estas personas cuenado llegan a la región de Canáan Membrillo, así como una mejora en las condiciones de acogida en la ERM de San Vicente.