Los ganaderos cántabros envían una carta al Ministerio exigiendo una respuesta inmediata para el control de lobos
Hoy se han enviado otros dos expedientes para pedir la extracción de ejemplares, aunque la respuesta al primero «no ha sido satisfactoria»
Cantabria exige al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITERD) que responda de manera inmediata a la solicitud de los técnicos de la Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente de realizar controles de lobo en la región con el fin de equilibrar la convivencia entre esta especie y la ganadería extensiva.
Los representantes del sector ganadero han mantenido hoy una reunión con el consejero del ramo, Guillermo Blanco, y parte de su equipo, y han acordado enviar una carta de manera conjunta al Ministerio, firmada por todos, con el fin de obtener una respuesta inmediata por parte de la ministra Teresa Ribera.
En concreto, en la reunión, además del consejero, han participado por parte del Gobierno de Cantabria el secretario general de la Consejería, Francisco Gutiérrez; y los directores generales de Biodiversidad, Medio Ambiente y Cambio Climático, Antonio Lucio; y de Ganadería, Beatriz Fernández.
Por parte del sector primario, han estado los representantes de las cuatro organizaciones profesionales agrarias: Gaspar Anabitarte (UGAM-COAG), Manuel Herrero (ASAJA), Alberto Pérez Quintial (UPA) y Manuel Sainz (AIGAS); de las tres cooperativas agrarias: Agapito Fernández (Ruiseñada-Comillas), José Ángel Pereda (AgroCantabria) y Germán Cantera (Valles Unidos del Asón), y el representante de la Federación de Asociaciones de Razas Cárnicas de Cantabria, Ángel Cuesta.
También el presidente de la Asociación Frisona de Cantabria (AFCA); Germán de la Vega; Ana Rubio, de la Asociación Vaca Pasiega; María del Carmen Ramasco, de la Asociación Hispano Bretón; Mercedes Fernández Gutiérrez, de la Asociación Caballo Monchino; Rafael Roiz, de la Asociación de Creadores de Raza Blanca de la Peña; Erika Pérez, de la Asociación de Oveja Carranzana de Cantabria (ASOCAN), y César Piris, de la Asociación de Ganaderos Ovino-Caprino de Cantabria (OVICAN).
Todos ellos han firmado una carta dirigida a la ministra Ribera, en la que denuncian que la inclusión, por parte del MITERD, de todas las poblaciones de lobo de España en el Listado de Especies en Régimen de Protección Especial (LESPRE), se ha hecho contra el criterio técnico y jurídico de las comunidades autónomas que habían conseguido, «gracias a la gestión realizada, conservar a la especie», además de que albergan en la actualidad «la práctica totalidad de ejemplares de lobo del país».
MÁS DE 500 ATAQUES
Según datos recientes, desde el 22 de septiembre de 2021 hasta primeros del mes pasado se han contabilizado 506 ataques de lobo en las diferentes comarcas de la región y un total de 690 reses muertas, a falta de sumar los ataques del mes de abril.
En el día de hoy se han enviado otros dos expedientes al Ministerio para solicitar la extracción de ejemplares, si bien la respuesta al primer expediente enviado «no ha sido satisfactoria» a pesar de las continuas conversaciones mantenidas con el MITERD, puesto que piden que se renueve la estrategia de conservación y gestión del lobo en España y es algo que «no nos podemos permitir por el excesivo tiempo que supone», ha subrayado Blanco.
Una actitud del Ministerio que, según Blanco, «ni entendemos ni compartimos porque ha roto años de consenso entre las comunidades autónomas y el Estado en materia de conservación de la naturaleza».
TEXTO DE LA CARTA
En la carta, tanto el Gobierno de Cantabria como los colectivos del sector ganadero afectados por los ataques del lobo consideran que la decisión del Ministerio ha sido tomada con «pleno conocimiento» de la oposición de todas las organizaciones profesionales agrarias que representan a los ganaderos, para los que «las pérdidas derivadas de los daños del lobo son una condena definitiva».
Después del «tremendo golpe» que supuso para la ganadería extensiva de Cantabria la inclusión del lobo en el LESPRE, muestran en la carta su «indignación al tener conocimiento de la postura del Ministerio sobre los controles de ejemplares que, en cumplimiento de la orden ministerial aprobada por el propio MITERD, quiere poner en marcha de forma inmediata la Consejería de Medio Ambiente del Gobierno de Cantabria».
«Desde el respeto que nos merece el cargo que ejerce como ministra y desde la legítima y radical discrepancia con sus decisiones convertidas en norma, que esperemos que los tribunales corrijan pero que mientras tanto nos vemos obligados a cumplir, le instamos a que colabore con el Gobierno de Cantabria en el desarrollo de la orden que el Ministerio ha aprobado, sin dilaciones y sin añadir aún más inseguridad jurídica a la que ya han generado hasta el momento», explican los firmantes en la carta.
En caso de no colaborar, advierten a la ministra que «tendremos que concluir que comparten, no sólo el objetivo, lo que ya es evidente, sino también las formas de aquellas organizaciones que han iniciado todo este proceso y que se caracterizan por su continua falta de respeto, desprecio y amenazas a los ganaderos cántabros, pero también a los técnicos de la propia Consejería y a instituciones como la Federación de Municipios de Cantabria, al Parlamento de Cantabria y al Gobierno regional, que hemos rechazado los argumentos y las decisiones que nos han llevado a la situación actual».
Tal y como se reclama en la carta, los daños que se vienen produciendo desde que entró en vigor la orden ministerial, que se han «recrudecido de forma muy importante en las últimas semanas y que se incrementarán aún más cuando el ganado extensivo suba a los pastos como requiere la gestión de estos territorios, exigen intervenciones de inmediato».
Por ello, el texto insta a la ministra a que tanto ella como su equipo respondan a las solicitudes que se hagan desde la Consejería y respondan de forma «clara y precisa», porque «solo así demostrarán a los ganaderos que quieren ser parte de la solución y no un problema como, desgraciadamente para todos, son hasta ahora».
La carta pretende hacer ver a la ministra que la gestión de lobo «no se arregla con más dinero porque los ganaderos reclaman lo que es justo, ni un euro más ni uno menos, pero no queremos trabajar para dar de comer al lobo».
«La ganadería extensiva es una actividad económica clave para la lucha contra el despoblamiento y para el mantenimiento de nuestro medio natural, y la gestión del lobo debe considerar, como recuerdan los propios científicos, el contexto social y las consecuencias económicas, pero también las ambientales, que puede conllevar ignorar los efectos que la falta de un control puede desencadenar», inciden.
Finalmente, los representantes del sector ganadero, han invitado a la ministra a que visite Cantabria a la mayor brevedad posible para reflexionar sobre la grave problemática del lobo en la región y, en caso de que no le sea posible viajar, le ha solicitado que «nos reciba en su despacho con la urgencia que el asunto requiere».