El Gobierno no cree que las relaciones con ERC estén rotas y confía en rebajar la tensión en la comisión de secretos
Muestra su apoyo a Robles y rechaza entregar su cabeza «por hacer su trabajo»
El Gobierno no considera que las relaciones con ERC estén rotas a pesar de la tensión generada por el caso de presunto espionaje a líderes independentistas escenificada este miércoles en el Congreso en las preguntas a la ministra de Defensa, Margarita Robles, según han indicado fuentes gubernamentales. Además, han confiado en destensar esta situación con ERC en la Comisión de secretos oficiales, que probablemente se reúna la próxima semana, tal como han indicado.
En este sentido, han indicado que son conscientes de las tensiones con ERC a lo largo de la legislatura y recalcan que no pretenden quitarle importancia, pero han descartado que la negativa de Esquerra a convalidar el decreto anticrisis que se vota este jueves en el Congreso vaya a suponer un punto de inflexión.
Por otro lado, las mismas fuentes han señalado que la ministra de Defensa, Margarita Robles, cuenta con todo el apoyo del Gobierno, y han rechazado que sea cesada «por hacer su trabajo», tal como han pedido ERC, la CUP y el BNG por el presunto espionaje a líderes independentistas.
Así han señalado que Robles «no ha hecho nada malo» y por tanto «no se puede ofrecer la cabeza de un ministro por hacer su trabajo», al tiempo que han precisado que cuenta con todo el apoyo de la parte socialista del Gobierno, ya que desde Unidas Podemos la acusaron de justificar el espionaje durante su intervención este martes en la sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados.
El portavoz de Unidas Podemos en el Congreso, Pablo Echenique criticó a la ministra y pidió responsabilidades políticas pero sin llegar a pedir explícitamente su dimisión. Sí lo hizo, el portavoz parlamentario de ERC Gabriel Rufián, que calificó de «burradas» las palabras de Robles.
Rufián afirmó que sería «una gran ministra en un Gobierno de PP y VOX y que su posición es «insostenible». Además, desde el Parlament, el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, remarcó que sus palabras «la incapacitan políticamente para seguir en este cargo» y le ha pedido que «asuma responsabilidades».
DEFIENDEN LA INTERVENCIÓN DE ROBLES
Desde el Gobierno han defendido la intervención de la ministra de Defensa este miércoles en la Cámara Baja y sostienen que apuntó a unas actuaciones concretas que justificaban la vigilancia pero no nombró a nadie.
Robles, preguntó a los nacionalistas desde la tribuna qué debe hacer un Gobierno cuando se vulnera la Constitución, se declara ilegalmente la independencia o cuando tienen «relaciones» con dirigentes de un país que está invadiendo Ucrania, en referencia a Rusia.
Asimismo, las citadas fuentes han criticado la reacción de ERC a la intervención de Robles y creen que «sobreactuó» para justificar su voto en contra del decreto del plan contra las consecuencias económicas de la guerra de Ucrania que este jueves debe convalidar el Congreso.