El Senado rechaza el planteamiento del PP de eliminar el Ministerio de Consumo para «aliviar» la inflación
La mayoría de los grupos del Senado han adelantado su rechazo a una iniciativa del PP en la que planteaba al Gobierno la eliminación del Ministerio de Consumo de Alberto Garzón «con el fin de que el coste de la estructura ministerial se destine a alivar a los ciudadanos del alto IPC».
Los populares habían llevado esta iniciativa al Senado a través de una moción consecuencia de interpelación, muy parecida a la que presentaron hace unos meses en el Congreso, con la que pretendían acabar con el departamento ministerial de Alberto Garzón proponiendo integrar sus competencias en el Ministerio de Sanidad y en el Ministerio de Hacienda y Función Pública.
Sin embargo, esta iniciativa ha contado solamente con el apoyo de Ciudadanos, Vox y UPN –además del PP–, con la abstención de Junts, y con el rechazo del PSOE y sus socios parlamentarios, como ERC, el PNV o Compromís, según han ido anunciando sus parlamentarios durante el debate de esta moción del PP.
La encargada de defender la postura del PP ha sido la senadora gallega Carmen Leyte, que, haciendo alusión al texto de la moción ha planteado la eliminación del Ministerio como una de las recetas para «aliviar a los ciudadanos del alto IPC que les está llevando a una progresiva pérdida de poder adquisitivo».
En este contexto, Leyte ha calificado al ministro Garzón como «ineficaz», apuntando a que «apenas tiene agenda y actividad» y recriminándole que «ataque a sectores claves», recordando algunas de sus polémicas pasadas. «Garzón no es tertuliano, es un ministro del Gobierno», ha subrayado.
Estas tesis han sido compartidas por los senadores de Ciudadanos, Vox y UPN, que han coincidido con el PP en señalar que, bajo su punto de vista, se puede prescindir del Ministerio que dirige Alberto Garzón, en consonancia con la iniciativa popular .
SOCIOS DEL GOBIERNO CREEN QUE SON PROPUESTAS «DEMAGÓGICAS»
Por el contrario, los socios del Gobierno, además del PSOE –Unidas Podemos no tiene representación en el Senado–, han recriminado al PP que lleve esta iniciativa a la Cámara Alta, coincidiendo en calificarla como «demagógica».
Así, el portavoz de Compromís en el Senado, Carles Mulet, ha afeado a los populares que esta iniciativa «no aporta nada», defendiendo la acción del ministro Garzón, del que ha reconocido equivocaciones, pero considera que «ha hecho propuestas».
Por su parte, la senadora de Junts Assumpció Castellví, que ha adelantado que su grupo se abstendrá, también ha tachado la propuesta como «populista» porque considera que eliminando un Ministerio «no bajará el precio de la luz», aunque reconoce que habría que repensar estructuras ministeriales en las que las comunidades autónomas tienen las competencias.
En el caso del PNV y ERC, que han hecho unas breves intervenciones, han recordado que la competencia de nombrar o quitar ministerios corresponde al presidente del Gobierno.
Por último, el senador del PSOE Manuel Ángel Fernández ha proclamado que esta iniciativa «tiene olor a demagogia tosca», reprochando al PP que «identifique la administración y los impuestos con el despilfarro» e ironizando con que «no existe un organismo más inútil que la Oficina del Español de Toni Cantó».