UGT recuerda que el nuevo marco de contratación impide los despidos colectivos en la Administración
UGT ha recordado este jueves que la entrada en vigor del nuevo marco de contratación de la reforma laboral impedirá los despidos colectivos dentro de las Administraciones Públicas y servirá para limitar la precariedad en los servicios públicos.
El sindicato consideraba que los Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) en la Administración suponían un «elemento de arbitrariedad» dentro de la Función Pública y podían derivar «en una especie de cesantía en manos de los diferentes gobiernos», como ha señalado en un comunicado.
UGT lamenta que durante la última década se han producido despidos del personal laboral de las Administraciones Públicas por causas técnicas, organizativas y económicas, una situación que se acentuó durante el Gobierno de Mariano Rajoy, que permitió ejecutar despidos colectivos de carácter extintivo. Eso derivó en el despido de más de 2.500 trabajadores, la mayoría de la Administración Local, durante la crisis económica.
La derogación de esa disposición fue el requisito «ineludible» para que UGT diera el visto bueno a la reforma laboral, pactada a finales de 2021 entre el Gobierno y los agentes sociales.
El nuevo marco de contratación vigente desde este jueves tampoco permitirá firmar contratos por obra y servicio. De hecho, durante febrero ya se firmaron 326.842 contratos indefinidos, la mayor cifra de la seria histórica, con un incremento del 139% respecto al mismo mes del año anterior, como apunta el sindicato.
La secretaria de Acción Sindical de UGT Servicios Públicos, Isabel Araque, también ha destacado el papel de la negociación colectiva y ha insistido en que se va a «solicitar la información necesaria desde los comités de empresa para exigir el correcto cumplimiento de la nueva normativa laboral».
«Nuestro objetivo es que se reduzca drásticamente la temporalidad en las plantillas, a corto y medio plazo», añade Araque.
El nuevo marco de contratación que se estableció en la reforma laboral entrará en vigor este jueves, 31 de marzo, tras cumplirse los tres meses de plazo transitorio que dio la norma para la adaptación de las empresas a la nueva regulación, cuyo objetivo principal es frenar la temporalidad en el mercado de trabajo.
Así, aunque la reforma laboral lleva vigente desde el pasado 31 de diciembre, el Gobierno decidió suspender la entrada en vigor de la mayor parte de los aspectos relacionados con el nuevo marco de contratación hasta el 31 de marzo. De esta forma, a partir de hoy, la reforma laboral estará plenamente vigente.
