ACNUR advierte de que las inundaciones y el desplazamiento pueden empeorar en Sudán del Sur para mayo
El Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR) ha advertido este martes de que las continuas inundaciones y el desplazamiento interno en Sudán del Sur pueden empeorar durante la temporada de lluvias prevista para el mes de mayo.
«Durante una visita de cinco días a principios de este mes, recorrí Old Fangak, Malakal, Jamjang y Bentiu y vi el impacto humano de esta inundación. También viajé al campo de refugiados de Yida, que en el polo opuesto está en medio de la sequía», ha explicado el asesor Especial sobre Acción Climática de ACNUR, Andrew Harper, durante una rueda de prensa en Ginebra.
Harper ha relatado que la infraestructura vial «deficiente» o «inexistente» dificulta la llegada de ayuda humanitaria, especialmente en «lugares remotos como Old Fangak», donde «la antigua pista de aterrizaje (en el aeropuerto) está completamente sumergida y actualmente es inoperable».
«En Old Fangak conocí a una mujer desplazada dos veces, de unos 70 años, que pasaba sus días sumergida en aguas turbias, tapando desesperadamente un dique de tierra porosa con palos y lodo para evitar que el agua inundara el pequeño complejo que alberga a su familia. Es realmente desgarrador verlo», ha detallado.
Por ello, ha hecho un llamamiento «para proteger a las poblaciones ya vulnerables de sus peores impactos». En este sentido, la zona tiene necesidad, según ha señalado, de bombas de agua y equipo pesado para construir fuertes barreras contra las inundaciones de cara a la temporada de lluvias.
Según los datos proporcionados por ACNUR, más de 835.000 personas se vieron afectadas y murieron cerca de 800.000 cabezas de ganado durante las inundaciones el pasado año 2021, que registraron un récord desde los últimos tres años.
En estas inundaciones, 33 de los 79 condados están afectados. Los impactos son especialmente severos en los estados de Jonglei, Unity y Upper Nile, donde miles de personas han tenido que desplazarse por la inhabitabilidad de los poblados.
«Si no aumentamos nuestro apoyo al pueblo de Sudán del Sur, la crisis climática, junto con la inseguridad continua, significará que los recursos se reducirán aún más, dejando a las personas sin medios para sobrevivir», ha dicho Harper, agregando que si no se actúa con urgencia «el coste será alto y con devastadoras consecuencias humanas».