RDCongo.- El grupo rebelde M23 derriba un helicóptero de la misión de la ONU en RDC, según fuentes militares
La ONU confirma que la aeronave «se ha estrellado» en una zona en la que se han registrado enfrentamientos con el M23
MADRID, 29
La MONUSCO, la Misión de Naciones Unidas en República Democrática del Congo (RDC), ha informado este martes de que uno de sus helicópteros ha sido derribado a su paso por una de las zonas del noreste en las que se han registrado recientes enfrentamientos con el grupo rebelde Movimiento 23 de Marzo (M23).
La MONUSCO ha detallado que en la mañana del martes han perdido el contacto con el helicóptero, en el que viajaban ocho personas cuando se encontraba haciendo labores de reconocimiento en el área de Tshanzu, en el sureste de Rutshuru en la provincia de Kivu del Norte.
Entre los ocho ocupantes había observadores de Naciones Unidas, según ha contado un portavoz de las Fuerzas Armadas de RDC, Sylvain Ekenge, a la agencia de noticias DPA, a quien ha confirmado que el M23 estaría detrás del ataque. Esta misma fuente han señalado que han desplegado un dispositivo para buscar supervivientes.
En sesión informativa, el portavoz de Naciones Unidas, Stéphane Dujarric, ha confirmado la «triste» noticia y la puesta en marcha de un dispostivo de búsqueda y rescate de las personas que viajaban en el aeronave siniestrada.
Dujarric ha precisado que entre las ocho personas que viajaban en el helicóptero había seis militares paquistaníes, y otras dos personas de nacionalidad rusa y serbia, «que se encontraban en una misión de reconocimiento».
«Se está llevando a cabo una investigación. Daremos más actualizaciones tan pronto como haya más información disponible», ha informado el portavoz de Naciones Unidas, que si bien ha confirmado que la zona en la que se ha «estrellado» la aeronave es escenario de enfrentamientos, no ha precisado el motivo del siniestro.
Los observadores de Naciones Unidas se encontraban en Kivu del Norte para conocer sobre el terreno la situación de las miles de personas que huyen de la violencia en la región rumbo a la vecina Uganda.
El M23 ha sido acusado desde noviembre de 2021 de llevar a cabo ataques contra posiciones del Ejército en esta zona del país, a pesar de que procedió a su desmovilización hace más de ocho años tras combates con el Ejército.
Las autoridades congoleñas y el M23 firmaron en diciembre de 2013 un acuerdo de paz tras los combates registrados desde 2012 con el Ejército, que contó con apoyo de tropas de Naciones Unidas. Expertos de la ONU acusaron a Uganda y a Ruanda de apoyar a los rebeldes, si bien ambos países lo negaron.