Iberdrola espera que el parque eólico del Escudo esté en funcionamiento dentro de un año

La compañía asegura que con este proyecto «ganamos todos» y que conlleva ventajas para las localidades que lo acogen

El CEO de Iberdrola Renovables, Julio Castro, ha manifestado que el objetivo de la compañía es tener en funcionamiento el parque eólico del Escudo dentro de un año, teniendo en cuenta «la madurez de los permisos» en la actualidad y que las obras de instalación son «muy rápidas».

Este proyecto, promovido por Biocantaber, sociedad que reúne a la compañía cántabra Ocyener, a Banco Santander y a Iberdrola, tiene ya la Declaración de Impacto Ambiental favorable del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico para la instalación de 25 aerogeneradores con capacidad para generar 105 megavatios y el visto bueno de la Comisión Nacional de Mercados y Competencia (CNMC). Además, espera tener «en breve» la autorización administrativa del mismo Ministerio.

Así lo ha avanzado Castro durante su participación este miércoles en el Foro SER Cantabria, organizado por la Cadena SER y la Universidad de Cantabria (UC) y que en esta ocasión ha tenido como tema las energías renovables, por lo que el CEO de Iberdrola Renovables ha enumerado los beneficios de este proyecto con el que, a su juicio, «ganamos todos».

La promotora gestiona también el único parque eólico de la comunidad ubicado en Soba, el de Cañoneras, y es «el más acogido, el más integrado» en el territorio, por lo que se quiere «repetir la experiencia» en proyecto del Escudo, que afecta a los municipios de Campoo de Yuso, San Miguel de Aguayo, Molledo y Luena.

En su charla titulada Cómo hacer las cosas bien en energías renovables. La oportunidad de Cantabria , Castro ha destacado que desde Iberdrola «queremos integrarnos con los pueblos que nos acogen» y para ellos el parque también implica «una serie de ventajas», pues la compañía colabora con mejoras como la apertura de caminos o actuaciones en las pistas. «Pretendemos que lo que quede en la cabeza de todos es: qué suerte que haya llegado Iberdrola. Ese sería nuestro grandísimo reto», ha resumido.

Asimismo, una «elevadísima» parte de la ejecución de las obras correrá a cargo de empresas regionales, y los elementos que no procedan de Cantabria se descargarán en el Puerto de Santander.

Castro también ha remarcado las «garantías» que ofrecen todos los trámites hasta que un proyecto eólico es aprobado en materia urbanística y medioambiental. De hecho, el Ministerio ha autorizado 25 aerogeneradores y no los 36 solicitados para permitir pasillos para el paso de avifauna, un ámbito en el que la compañía está haciendo un «gran esfuerzo» con medidas como el uso de cámaras que detectan sus figuras y evitan la colisión de aves con las palas de los aerogeneradores.

Además, el CEO ha asegurado que sus actuaciones van «mucho más allá» de lo que marca la declaración de impacto ambiental y comprenden mejoras en la zona, recuperando los humedales y creando zonas protegidas para el ganado. De hecho, el proyecto implica una inversión de «entre 110 y 120 millones» de euros y se estima que en torno a un 15% vaya destinado a medidas de protección de fauna y flora y de las turberas.

Los avances tecnológicos permiten ahora hacer parques «menos amplios y con más potencia», pues El Escudo tendrá 105 megavatios con 25 aerogeneradores –que serán «lo mejor que tenemos en la tecnología» para soportar condiciones climáticas de la zona como la nieve o el viento racheado–, mientras Cañoneras tiene 32 megavatios con 38 aerogeneradores.

Castro ha dicho que «se considera cántabro» porque siempre ha veraneado en Laredo y por tanto «entiende la idiosincrasia de la región» y que pueda haber «discrepancias», pero ha considerado que «no hay un rechazo general» y ha sostenido la necesidad de implantar estos parques para cumplir la normativa europea y combatir el cambio climático. PRECIO DE LA ENERGÍA

A preguntas de los asistentes al acto, entre ellos el rector de la UC, Ángel Pazos, el CEO de Iberdrola ha hablado también del precio «disparado» de la energía, provocado por la «desestabilización que hay en el mundo de los combustibles» y que estima que baje cuando haya una relajación en el conflicto entre Rusia y Ucrania, que está «duplicando los precios del gas natural».

Pero «la escalada en Ucrania no solo no cesa, sino que se agrava», ha advertido, a lo que se suma también el conflicto con el tránsito del gas entre Argelia y Marruecos.