El 70 por ciento de los hogares de Somalia no tienen comida suficiente por la sequía, alerta Save the Children
El 70 por ciento de los hogares de Somalia carecen de alimentos suficientes en un contexto de sequía que ya se ha llevado por delante a casi 700.000 cabezas de ganado, entre camellos, cabras, ovejas y vacas, según un estudio de la ONG Save the Children que alerta de los efectos de la peor escasez de agua en una década.
La organización ha entrevistado a más de 12.000 personas de 15 de las 18 regiones que conforman Somalia y ha constatado que en más de un tercio de los hogares al menos una persona no había comido nada en las 24 horas previas. En casi seis de cada diez familias, al menos un miembro había perdido su fuente de ingresos, en gran parte por la muerte de ganado.
Las ONG han redoblado en estas últimas semanas sus alertas, con el recuerdo aún presente de las 250.000 personas que murieron de hambre en 2011 en Somalia. El Programa Mundial de Alimentos (PMA) prevé que la cifra de personas en inseguridad alimentaria grave pase de 3,5 a 4,6 millones entre febrero y mayo si no se actúa ya.
Save the Children ha apuntado que las prolongadas sequías han venido a sumarse en el caso somalí a la inseguridad, las plagas de langostas en las zonas desérticas, la subida del precio de los alimentos, la reducción de las remesas y la reducción de las donaciones internacionales. A día de hoy, sólo se han cubierto un 2,3 por ciento de los fondos requeridos por la ONU.
El director de Save the Children en Somalia, Mohamud Mohamed, ha advertido de que el margen para prevenir «un gran desastre humanitario» es «estrecho». «Fracasamos en 2011, aguantamos en 2016-2017 y ahora parece que hemos vuelto al punto de partida», ha advertido, en un comunicado en el que ha expresado su temor por que el «sufrimiento» del puedo somalí pueda quedar eclipsado.
Sufrimiento de personas como Omar, padre de familia que ha pasado de alimentar a sus hijos tres veces al día a luchar por hacerlo dos. «Fuimos capaces de sobrevivir durante la sequía anterior, pero esta es peor que nunca y el agua es más difícil de encontrar. No tenemos comida y el ganado se está muriendo», señala.
Save the Children trabaja para ayudar a las comunidades afectadas por la sequía, con énfasis en el apoyo a niños desnutridos, el mantenimiento de las clases, la gestión de instalaciones sanitarias y el apoyo a la subsistencia de la población más vulnerable.