Calviño confía en seguir contando con el apoyo de los socios de investidura para «culminar la agenda de reformas»
BILBAO, 6
La vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, ha confiado en poder seguir contando con el apoyo de los socios de investidura de Pedro Sánchez y culminar así la «agenda de reformas que quedan hasta el final de legislatura. Además, ha considerado «positivo» que Ciudadanos se haya «dado cuenta de que no puede seguir escorado a la derecha».
En una entrevista concedida a El Correo, recogida por Europa Press, Calviño analiza la convalidación del decreto de la reforma laboral y acusa al PP de tener una «actitud negacionista, destructiva» y no demostrar «ninguna responsabilidad en un momento tan importante».
Respecto a formaciones como PNV y ERC, que rechazaron finalmente la reforma, Calviño cree que van a seguir «trabajando bien con ellos». «Quitando este caso concreto, han aprobado gran parte de las iniciativas. De hecho, llevamos tres años y medio gobernando sin una mayoría absoluta. Creo que de aquí a final de legislatura seguiremos tejiendo estas relaciones y sacando adelante los proyectos legislativos», defiende.
En esta línea, confía en «poder seguir trabajando intensamente con estos socios» para sacar adelante próximos proyectos. «Siempre hemos buscado los máximos apoyos, sin cerrarnos a nadie, es la aritmética parlamentaria que tenemos», insiste.
Asimismo, defiende que el Gobierno, en la actual situación parlamentaria, debe buscar los máximos apoyos posibles y destaca que en los últimos años «los apoyos han variado en las distintas iniciativas legislativas».
«Lo que sí creo que es positivo es que Ciudadanos, por fin, se haya dado cuenta de que no puede seguir escorado a la derecha y tiene que parecerse más a los liberales en otros países de la UE, que incluso gobiernan en coalición con los socialdemócratas, como Alemania», afirma.
Por otro lado, reconoce que le sorprendieron las críticas del PNV a la patronal y lamenta que no haya avalado una reforma laboral que apoyaban los empresarios vascos y que «es muy buena para Euskadi».