Pacientes con enfermedades crónicas tienen niveles bajos de anticuerpos tras la segunda dosis, según estudio
Pacientes con enfermedades crónicas tienen niveles insuficientes de anticuerpos para combatir la COVID-19, incluso después de inocularse la segunda dosis, según un estudio realizado por investigadores médicos del hospital de Denver (Estados Unidos) National Jewish Health.
La investigación, que se ha publicado en la revista Chest , ha analizado a 360 pacientes, con una edad media de 62 años, quienes recibieron las dos dosis de la vacuna de Pfizer o Moderna entre el 16 de diciembre de 2020 y el 24 de julio de 2021 y que se realizaron una prueba de anticuerpos al menos 14 días después de la segunda vacuna.
«Ese no es un número insignificante, y aunque no representa a la población general, representa una quinta parte de los pacientes en un centro como el nuestro, que trata a personas con enfermedades crónicas y que a menudo están inmunodeprimidas. Las personas de este grupo corren un riesgo significativo de desarrollar COVID y pueden sentir que están protegidas después de la vacunación cuando en realidad no es así», ha asegurado el autor principal del estudio, Michael Wechsler.
Así, se ha descubierto que el 21 por ciento de los consultados tenían poco o ningún nivel de anticuerpos contra el SARS-CoV-2. Las afecciones por las que estaban siendo tratados esos pacientes iban desde el asma (14%) hasta la insuficiencia cardíaca congestiva (48%). Este es el primer estudio que investiga los efectos de las condiciones médicas crónicas subyacentes en la respuesta de anticuerpos.
«Si una persona en este grupo está, por ejemplo, tomando un inmunosupresor, o tiene enfermedades pulmonares intersticiales o insuficiencia cardíaca congestiva, le recomendamos que se haga una prueba de sus niveles de anticuerpos. Si son bajos, los pacientes deberían considerar más seriamente recibir una vacuna de refuerzo y tal vez incluso una cuarta dosis, eventualmente. También queremos que tengan cuidado de no ponerse en peligro a medida que se levantan las medidas de precaución de enmascaramiento y distanciamiento», ha explicado el primer autor del artículo, Shu-Yi Liao.