Un nuevo estudio avala el cribado de cáncer de pulmón en España como coste-efectivo
Lung Ambition Alliance (LAA) España ha presentado nuevos resultados de un reciente análisis de coste-efectividad que sugieren que un programa de cribado de cáncer de pulmón en España, siguiendo los criterios del estudio NELSON sería coste-efectivo (2.345 euros por años ganados ajustados por calidad de vida, AVAC), confirmando lo ya hallado en estudios previos en otros entornos geográficos.
Estos resultados estarían en línea con el coste-efectividad de otros programas de cribado ya financiados en España como el cribado en cáncer colorrectal (2.154/AVAC), mama (15.000/AVAC) o cérvix (18.646/AVAC) y por debajo del umbral de disponibilidad a pagar por AVAC ganado planteado recientemente en España situado en torno a los 21.000-25.854/AVAC.
Desde la LAA, con base al documento Nuevos resultados sobre la eficiencia de un programa de cribado de cáncer de pulmón en España , se considera que es un buen punto de partida que demuestra la potencial eficiencia que puede tener en España un programa de cribado en cáncer de pulmón.
En este documento también se han considerado potenciales limitaciones sobre: el método de estimación de la población diana, ya que habría que definir la mejor estrategia para la campaña de invitación; la distribución por estadios de los pacientes diagnosticados, estructura basada en un estudio de hace 10 años (Ramos 20173) pero que no ha variado considerablemente desde entonces; los tratamientos incluidos, ya que se han incorporado al Sistema Nacional de Salud nuevos tratamientos, especialmente en estadios avanzados, que han cambiado la práctica clínica que podría incluso hacer que el cribado fuera más coste-efectivo, ya que se espera que el porcentaje de pacientes en estadios iniciales, asociados a un menor coste y mejor pronóstico, sea mayor que en la situación actual sin cribado.
En los últimos 15 años, varios estudios han demostrado el valor del cribado de cáncer de pulmón en personas de alto riesgo. El estudio NSLT (National Lung Screening Trial) incluyó a 53.000 personas, y fue publicado en 2011, demostrando, en fumadores o ex fumadores de más de 30 paquetes al año en voluntarios de 55 a 74 años, la eficacia del TAC de baja radiación como método de cribado de cáncer de pulmón, al encontrar una reducción de la mortalidad asociada al cáncer de un 20 por ciento, frente a realizarlo mediante radiografía de tórax.
En el año 2020 se publicaron los resultados del estudio NELSON que evidenció que hacer TAC de baja dosis reduce el riesgo de muerte a 10 años un 26 por ciento en varones y hasta un 61 por ciento en mujeres, lo que indica una mayor magnitud en el impacto de esta medida que en el trabajo americano. Además, pone de manifiesto que no es necesario repetir la prueba cada año y abre el intervalo entre TACs y añade factores de riesgo como padecer enfisema.
«El reciente análisis de coste-efectividad del cribado en cáncer de pulmón en España basado en el ensayo clínico NELSON (Gómez-Carballo 2021) aporta información relevante sobre la eficiencia de esta opción. Este análisis muestra una relación coste-efectividad muy favorable y fundamentada principalmente en los beneficios y la optimización del manejo del cáncer de pulmón asociados al aumento del diagnóstico en estadios tempranos. Aunque hacer un TAC de baja dosis tiene un coste elevado, el tratamiento de los pacientes con cáncer de pulmón a los que se les administra quimioterapia y/o inmunoterapia, supone un gasto muy superior al del paciente que puede ser intervenido quirúrgicamente. Gracias a la operación realizada tras un diagnóstico precoz mediante cribado, un 80 por ciento de los pacientes vivirán», ha comentado Laureano Molins, jefe del Servicio de Cirugía Torácica Hospital Clínic de Barcelona y coordinador nacional de Lung Ambition Alliance España.
«Desde el punto de vista de reducir las muertes por cáncer de pulmón el cribado ha demostrado resultados de evidencia científica. Pero ¿es eficiente? La respuesta es clara, ya que solamente debemos comparar el coste de hacer un TAC con el coste de una operación y dar un tratamiento oncológico a un paciente con pocas esperanzas de sobrevivir. Aunque todavía debemos reflexionar sobre qué hacer con los falsos positivos y la forma de cribar de forma certera a la población, el coste-eficiencia del diagnóstico precoz es evidente», ha señalado el doctor Luis Paz Ares, jefe del Servicio de Oncología Médica del Hospital Universitario 12 de Octubre y jefe de la Unidad de Cáncer de Pulmón H12o-CNIO.
Los nuevos resultados revelados avalan desde el punto de vista económico la implantación del sistema de cribado en España, pero desde la Lung Ambition Alliance se es consciente que se trata de «un punto de partida esperanzador, pero todavía se deben superar ciertas limitaciones, entre los cuales identificar de forma correcta a la población diana e incluir los costes asociados de los falsos positivos y el sobrediagnóstico».
«Demostrada la eficacia del cribado del cáncer de pulmón, el mayor reto que tenemos para su implementación en España es identificar de forma correcta a la población de riesgo a la que dirigirlo, es decir la identificación de fumadores activos o personas que hayan dejado de fumar en los últimos 15 años una cantidad significativa de tabaco ( más de 30 paquetes año) y que se encuentren en la franja de edad 55 a 75 años. Para mi es fundamental poner en marcha proyectos piloto en diferentes Comunidades Autónomas que nos permitan explorar la mejor manera de llevarlo a cabo a nivel nacional. También es crucial hacer una correcta asignación de recursos necesarios», ha reflexionado la doctora Pilar Garrido, jefe de Sección del Servicio de Oncología Médica del Hospital Universitario Ramón y Cajal de Madrid.