CCOO pide «garantías» para la presencialidad en las aulas y «no dejar caer la responsabilidad» sobre personal y alumnos
La Federación de Enseñanza de Comisiones Obreras en Cantabria ha reclamado «un protocolo claro de gestión del COVID-19» que permita una «presencialidad con garantías en las aulas de Cantabria», y «no dejar caer la responsabilidad» sobre el personal y el alumnado de los centros educativos.
En un comunicado, la secretaria general de la Federación, Conchi Sánchez, ha lamentado que el regreso a las clases tras las vacaciones «esté marcado por la falta de previsión y la improvisación», y se haya dejado todo, de nuevo, «en manos de la buena voluntad del personal educativo, las familias y el alumnado». «Esto parece un sálvese quien pueda», ha considerado.
Respecto a las medidas que se llevan a cabo en los centros, la sindicalista ha insistido en que, excepto la responsabilidad de los rabajadores y del alumnado y el uso de geles y mascarilla, respetar las distancias de seguridad dentro de los centros es «inviable» porque «falta personal docente para hacer grupos más pequeños».
En este sentido, Sánchez ha reclamado «la recuperación y mejora de medidas que nunca debieron eliminarse», como la provisión de las plantillas extra –actualmente hay unas 200 personas por baja COVID en la educación cántabra–, y demás medios y medidas «racionales», como asegurar la vacunación de todo el personal, o garantizar que ninguna persona esté contagiada habilitando lugares para hacer test masivos, por ejemplo. Según la sindicalista, solo de esta manera «podremos tener la presencialidad con garantías y medidas de seguridad que defendemos desde CCOO».
También se ha referido a la nueva decisión de confinar las aulas a partir de cinco personas contagiadas, un nuevo protocolo «que cambiaron de la noche a la mañana» y que, en su opinión, hará «muy difícil que haya aulas en cuarentena, porque no hay protocolos claros, ni seguimiento de los casos ni cribados masivos», ha denunciado.