La plantilla ZTE cierra este viernes una semana de paros por el deterioro de servicio
Temen que la multinacional china abandone el proyecto en 2022 por no ver garantizado el negocio tras la compra de Másmóvil
BILBAO, 16
La plantilla de ZTE, proveedor de telecomunicaciones de Euskaltel subrogada en 2014 a la multinacional china, cerrará este viernes una semana de movilizaciones, convocadas por ELA y CCOO Euskadi, en defensa de sus derechos, su futuro laboral y la calidad del servicio, cuyo deterioro progresivo consideran «preocupante» como consecuencia del modelo de gestión de la compañía.
Loss trabajadores de ZTE MSSE Zamudio, tras movilizaciones de diversa intensidad, convocaron una huelga entre el 13 y el 17 de diciembre para denunciar que «la amortización de puestos, la política de contratación de personal eventual y temporal a bajo coste, la derivación de recursos hacia otros proyectos y la falta de medios técnicos», están afectando la relación con Euskaltel, su principal cliente, «derivando en la recepción de notificaciones con preavisos de sanciones millonarias por deficiencias en los servicios».
En un comunicado, CCOO Euskadi ha recordado que estos trabajadores, fueron «los olvidados» del primer proceso de externalización que realizó el operador vasco, al que perteneció la mayor parte de la plantilla actual de ZTE, que fue subrogada en el año 2014 a la multinacional china ZTE para preparar la salida a Bolsa del operador de telecomunicaciones.
Durante estos años, prosigue la denuncia sindical, la empresa asentada en Zamudio, se ha centrado en hacer frente al pago de parte de la sanción de 1.200 millones de dólares, impuesta por el Departamento de Comercio de Estados Unidos a la matriz ZTE por «violar las condiciones de exportación» que impone el país americano.
Además, ha indicado que, igualmente, está haciendo «frente al pago anual a la central china de varios millones de euros por servicios prestados a su subsidiaria y nunca justificados» a la representación sindical que ostentan ELA y CCOO Euskadi, quienes han convocado esta semana de huelga para denunciar la congelación salarial desde 2018 y la precarización de las condiciones de trabajo.
A LA DERIVA
Las solicitudes de la plantilla para intentar corregir «esta deriva», así como la atención de sus necesidades y mejora de las condiciones laborales «no han sido atendidas durante años en base a argumentos económicos y de política de empresa utilizados por la dirección para justificar su postura» han criticado.
Estas condiciones laborales sin atender se concretan en el incremento salarial referenciado al IPC para el periodo 2019-2024, la asunción de un compromiso «serio» para negociar la Clasificación Profesional y en un dimensionamiento «adecuado» de las distintas áreas como «requisito» para cubrir las necesidades de los clientes y la regularización de las más de 17.000 horas de compenso acumuladas y no disfrutadas por la plantilla ebido a la falta de personal.
Ante esto, la plantilla ve «comprometido su futuro laboral por el deterioro de su imagen profesional frente a los clientes», debido a la propuesta de la empresa de posponer las negociaciones y de la aplicación del IPC 2021-2024 solo hasta 2023, al no considerar garantizado «suficientemente» el compromiso de carga de trabajo para Euskaltel, tras ser adquirida por MásMóvil, lo que, desde su perspectiva, confirmaría «la posible intención de la multinacional china de abandonar el proyecto a lo largo de 2022».
Ante estas circunstancias las trabajadoras y trabajadores de ZTE MSSE Zamudio han iniciado movilizaciones de diversa intensidad incluida esta huelga de cinco jornadas, para «intentar proteger sus derechos, la calidad de los servicios prestados a sus clientes y su futuro laboral».
En este sentido, el comité de empresa ha registrado esta semana una denuncia ante la Inspección de Trabajo y anunció que trabajaba en otra más porque la empresa interpreta los servicios mínimos decretados por el Gobierno Vasco «de forma errónea e interesada».
Por otra parte, desde el punto de vista de ELA y CCOO Euskadi, la empresa obliga a las personas que están cubriendo los servicios mínimos a realizar trabajos administrativos no contemplados en el decreto.
«Por si esto fuera poco, el trabajo no realizado por los huelguistas está siendo desempeñado por los trabajadores temporales de ETT y por personas con responsabilidad en el ZTE MMSS, esa sustitución, para el comité de empresa, «es una vulneración de un derecho básico».