Ningún país de Iberoamérica supera el 70 por ciento de avance en inclusión educativa, según la OEI
La Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI) ha publicado este jueves un informe en el que alerta de que ningún país iberoamericano supera el 70 por ciento de avance en inclusión educativa.
El informe Educación inclusiva hoy: Iberoamérica en tiempos de pandemia , también recoge que más del 85 por ciento de los países de la región contempla la inclusión dentro de sus constituciones y leyes de educación, pero la brecha está muy presente en aspectos como la digitalización o en colectivos como los afrodescendientes.
Las mayores prácticas de inclusión y equidad en las aulas iberoamericanas se dan en el nivel preescolar y en ámbitos como la discapacidad o el género, mientras que el colectivo que más se visibiliza en las normativas corresponde a las personas con discapacidad (94,4 por ciento), seguido de la inclusión de género (88,9 por ciento).
Por otro lado, la población afrodescendiente, con un 55 por ciento, representaría el colectivo que menos se encuentra reflejado en la normativa de educación seguido de la educación de las personas en situación de migración, pacientes hospitalizados o en reposo médico prolongado, que registra un 66,7 por ciento.
El documento también pone en valor cómo todos los países de la región han avanzado en cuanto a inclusión y equidad en sus legislaciones, con avances en la superación de barreras que en ningún caso están por debajo del 50 por ciento. Además, durante la emergencia sanitaria, la región ha volcado sus esfuerzos en la disminución de las brechas, teniendo en cuenta aspectos como el nivelsocioeconómico, grupos étnicos, género o ruralidad en áreas comarcales y de difícil acceso.
No obstante, estas medidas para la eliminación de barreras no se han puesto en marcha de manera generalizada, y no supera el 70 por ciento en ningún país iberoamericano.
En el contexto de la pandemia, las alternativas más frecuentes para asegurar la continuidad educativa de grupos de población más vulnerable y marginada ha sido la enseñanza a distancia y los ajustes en los currículos escolares, junto a otras medidas clave como la entrega de alimentos o de recursos de aprendizaje a docentes, estudiantes y familias, así como el apoyo a padres, madres y cuidadores para que se involucraran en el aprendizaje a distancia.
Por último, el informe menciona que las agencias de cooperación internacional han sido las instituciones que más han apoyado programas de educación inclusiva y equitativa en Iberoamérica, con más del 80 por ciento de implicación, por encima de bancos, ONG, empresas privadas y otras organizaciones civiles.