Aragón sostiene que el pasaporte COVID persigue «unas Navidades lo más normales que se pueda»
ZARAGOZA, 25
El presidente de Aragón, Javier Lambán, ha explicado que la entrada en vigor del pasaporte COVID desde este jueves, 25 de noviembre, es una medida «ponderada» y «ajustada a la realidad epidemiológica del momento» y persigue «hacer posible unas Navidades lo más normales que quepa imaginar».
Así lo ha manifestado tras reunirse en la sede del Ejecutivo autonómico con el presidente de la Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales, y el presidente de la Federación Aragonesa de Fútbol, Óscar Fle.
Lambán ha enfatizado en que la medida se pone en marcha «en un momento de incremento de contagios» de coronavirus, aunque, «por suerte, no tiene nada que ver con la vivida hace un año, gracias a la vacuna», como también se está haciendo en otras comunidades autónomas y países europeos, «pensando en la salud y la vida de los aragoneses».
Ha comentado que el director general de Salud Pública, Francisco Javier Falo, se reunió con el sector de la hostelería antes de aprobar el decreto que recoge el pasaporte COVID, «para explicárselo».
Lambán ha considerado que su puesta en marcha «no entorpece la actividad de estos sectores», al contrario, se trata de que puedan afrontar la Navidad, igual que las familias, «lo más próximas a la normalidad», una medida «bastante ajustada a la dimensión del problema», y con el propósito de dejar a un lado otras restricciones vigentes en meses pasados.
RECHAZO
El presidente de Aragón ha abundado al señalar que las medidas se toman «cuando se creen que se tiene que tomar, midiendo mucho los efectos que pueden producir en todos lo ámbitos de la vida privada y pública», aunque ha reconocido que la adopción de las mismas «siempre suscitan polémica y algún tipo de rechazo».
Respecto al anuncio de los empresarios del ocio nocturno de recurrir al pasaporte COVID y pedir medidas cautelarísimas, ha valorado que este tipo de reacción por parte del sector es un «clásico» y «no me voy a pronunciar».
Sobre las críticas del PP a la medida, ha reflexionado: «Pensaría que ha ocurrido algún tipo de catástrofe nuclear o consecuencia del cambio climático si no hubiera salido diciendo que algo que ha hecho el Gobierno de Aragón está mal», es otro «clásico», al que, durante la pandemia, «nos hemos acostumbrado».
EVOLUCIÓN DE LA PANDEMIA
El presidente ha insistido, respecto a la evolución de la pandemia, en que hay que ser «cauteloso» porque «si algo nos ha enseñado el maldito virus es que una parte de la planificación que hay que hacer es impredecible por naturaleza».
«No sé como irán evolucionando los contagios, esperemos que lleguemos a la meseta y experimentemos un decremento de los mismos» y «que las gentes que no se han vacunado, se vacunen y ojalá el pasaporte COVID sirva para eso», ha apuntado.
A colación, ha sostenido que las personas no vacunadas «es obvio que constituyen un factor de riesgo para los demás» y «seguramente esta media será un estímulo» para ellas. «No sé como calificar determinadas actitudes de personas no vacunadas», ha añadido, quienes, en su opinión, entienden «que por ser más libres pueden poner en riesgo la salud y la vida de los demás».
Asimismo, el presidente aragonés ha considerado, tras la decisión de la Agencia Europea del Medicamento de dar el visto bueno a la vacuna de Pfizer contra la COVID-19 en niños de 5 a 11 años, que cuanta más vacunación, «menos riesgos de contagios, de repuntes, de pervivencia de la COVID-19» por eso «no veo mal que el espectro de edades se amplíe al máximo».
Lambán también ha deseado que el Gobierno de España «dé algún paso más para establecer medidas homogéneas para todo el país» en relación con el pasaporte COVID.