Detenidos dos periodistas de RT France en Polonia durante la cobertura de la crisis migratoria en la frontera
Los periodistas David Jalifa y Jordi Demory, de la cadena RT France, han sido detenidos este lunes en suelo polaco cuando se encontraban en la zona cubriendo la crisis migratoria registrada en la frontera con Bielorrusia.
Según ha informado la propia cadena, Jalifa se encontraba junto a Demory en la localidad de Usnarz Gorny, cerca de la frontera, donde ambos analizaban la situación migratoria.
Ambos habían acusado a la Policía de Polonia de comportarse de forma «hostil» y habían alertado de que la situación era «extremadamente tensa». «En varias ocasiones nos pidieron que abandonáramos el lugar y dejáramos de grabar», dijo Jalifa antes de ser arrestado. Los dos han sido trasladados en un autobús a la localidad de Sokolka, a unos 20 kilómetros de Usnarz Gorny.
Xenia Fedorova, directora de RT France, ha aseverado que su último mensaje «hablaba de unas esposas» y que, posteriormente, no han logrado contactar con el equipo. Sin embargo, Ursula Szomko, portavoz de la Policía polaca, ha aclarado que los dos se encontraban en una zona «prohibida» realizando actividades «ilegales».
En este sentido, ha manifestado que la cadena ha contactado con la Embajada de Francia en Varsovia para denunciar el caso y ha señalado que espera que «el problema se resuelva pronto». «Si no los dejan en libertad, tomaremos otras medidas», ha insistido.
El secretario general del Sindicato Nacional de Periodistas, Dominique Pradalié, ha recalcado que los derechos de la prensa «deben ejercerse en todas partes, incluso en las denominadas zonas prohibidas». «Es nuestra misión como periodistas ir donde están sucediendo los hechos para informar a la ciudadanía. Es el derecho a informar y ser informado», ha dicho.
La tensión ha aumentado en la zona a raíz del incremento de la llegada de migrantes a la frontera con Polonia. La situación ha provocado un nuevo cruce de acusaciones entre la UE y Bielorrusia, que habría relajado su política migratoria en represalia por las sanciones impuestas desde Bruselas tras las polémicas elecciones de agosto de 2020, donde el presidente, Alexander Lukashenko, renovó su mandato.
La mayoría de los migrantes que llegan ahora a la frontera polaca proceden de países como Siria e Irak, si bien la crisis ha sido calificada por el bloque comunitario como una «guerra híbrida» desde Bielorrusia.
Las ONG, por su parte, han advertido de la grave situación humanitaria en la zona, especialmente ante las bajas temperaturas y debido al creciente despliegue de tropas en suelo polaco y bielorruso.
