Presidenta Asamblea Madrid no va a dimitir y dice que «nunca» se había imputado un delito a un familiar
Recalca que los diputados tienen que estar adscritos al «decoro parlamentario» y al reglamento
La presidenta de la Asamblea de Madrid, Eugenia Carballedo, ha asegurado que «en absoluto» va a dimitir tras el rifirrafe ayer con una diputada socialista que acabó con la oposición fuera del Pleno y ha justificado la expulsión de la misma porque «nunca» se había imputado un delito «de forma tan directa y concreta» al entorno de un diputado.
Así ha respondido a su llegada a un desayuno informativo del consejero de Economía, Hacienda y Empleo, Javier Fernández-Lasquetty, al ser preguntada por la petición del PSOE de que cese en su cargo tras el incidente de este jueves.
«Respeto la postura de los grupos de izquierdas, pero los diputados tienen derechos, el privilegio de la inviolabilidad y también deberes. Yo tengo que velar por el decoro de la institución», ha recalcado Carballedo.
Ha defendido que si los miembros de la izquierda «no entienden» que tiene que haber un «mínimo respeto a los adversarios» tienen «un problema» porque el reglamento «hay que cumplirlo».
Al hilo, ha insistido en que ella lleva diez años en la Cámara de Vallecas y que «nunca» se había imputado de forma tan «directa» un delito como ayer al hermano de la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso».
«Es la primera vez que veo algo de ese calibre y nada similar ocurrió ayer», ha incidido al ser preguntada por la supuesta «falta de neutralidad» en la sesión de ayer y ha aseverado que desde la bancada de la izquierda «se insulta con total naturalidad».
«No voy a cejar en el empeño para que se mantenga debate publico de calidad y respetuosos y cumpliendo el reglamento», ha zanjado.