Baldoví se disculpa por responder «con el hígado» a un «exabrupto» de Vox pero subraya que «nunca» bajará la cabeza
El portavoz de Compromís en el Congreso, Joan Baldoví, se ha disculpado este miércoles en el Pleno de la Cámara por haber respondido «con el hígado» y con «exceso de testosterona» al «exabrupto» que, según ha recordado, le dedicó la semana pasada un diputado de Vox, pero ha dejado claro que «nunca» bajará «la cabeza» ante ese grupo parlamentario.
Fue hace justo una semana, durante el debate de las enmiendas de totalidad a los Presupuestos para 2022, cuando el diputado de VoxJuan Luis Steegmann le espetó «eso no se lo dices a la cara» cuando Baldoví mentó al líder del partido, Santiago Abascal, y al vicepresidente cuarto del Congreso, Ignacio Gil Lázaro.
«Cuando quieras y donde quieras», le respondió desde la tribuna el diputado de Compromís, quien acababa de felicitar a la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, por «desenmascarar» con su discurso a estos dos diputados de Vox, unos «chaqueteros», según el parlamentario valenciano, que desertaron del PP cuando se acabaron la ubres que les amamantaban».
Aprovechando la presencia de la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, Baldoví ha querido pedir disculpas a ella, al resto de diputados y a la ciudadanía por haber replicado a Steegmann, según sus propias palabras «con el hígado» y con un «exceso de testosterona» del que, ha confesado, no siente «especialmente orgulloso».
«Estos incidentes devalúan esta Cámara y la política, ofrecen una imagen poco edificante de este Congreso y apartan el foco de lo verdaderamente importante para los ciudadanos que no tienen que ser estas pequeñas anécdotas que no deberían suceder», ha explicado.
HABRÁ HUMOR PERO NO ME ACHANTARÉ
Además, se ha comprometido a intentar responder a partir de ahora con «ironía, educación y sentido del humor» a ese tipo de «exabruptos», pero ha querido dejar claro que no piensa achantarse ante Vox.
«Que tengan claro los señores de Vox que nunca bajaré la cara», ha dicho, antes de recordarles un refrán que le enseñó su abuela: «Quien dice lo que quiere, acaba escuchando lo que no quiere», ha avisado.