Marruecos deja claro que no ofrecerá a la ONU «nada más» que la autonomía limitada del Sáhara Occidental
El ministro de Exteriores reitera el aviso de Mohamed VI sobre las relaciones económicas con países con posiciones «vagas o ambivalentes»
El ministro de Exteriores de Marruecos, Nasser Bourita, ha aplaudido el reciente discurso de Mohamed VI con motivo del aniversario de la Marcha Verde y ha recordado, entre otros aspectos, que Rabat está dispuesto a revisar los lazos económicos y comerciales con aquellos países que mantengan posturas «vagas y ambivalentes» en asuntos de primer orden como la soberanía del Sáhara Occidental.
El rey ya lanzó esta advertencia en un discurso que, en palabras de Bourita, expuso claramente los contornos de la doctrina diplomática marroquí sobre el tema de la integridad territorial». Así, aunque Rabat dice estar dispuesto a un «arreglo definitivo» del conflicto, enfatiza que la autodeterminación planteada por el Frente Polisario es una línea roja.
Bourita ha comparecido ante la Cámara de Consejeros básicamente para reivindicar las líneas que ya había marcado el monarca –no en vano, es Mohamed VI quien guía la diplomacia en Marruecos– y para proclamar que ahora el país se siente con una «credibilidad reforzada» en la escena internacional.
«La marroquidad del Sáhara es una realidad inmutable e indiscutible, por la fuerza de la historia, la legitimidad, la voluntad de sus hijos y un amplio y creciente reconocimiento internacional», ha asegurado Bourita, según un discurso recogido por la agencia de noticias MAP.
Así, «la marroquidad del Sáhara nunca estará en la agenda de ninguna negociación», tal como viene defendiendo históricamente Rabat y pese al supuesto interés marroquí de colaborar con el nuevo enviado especial de la ONU, Staffan de Mistura, que ya ha iniciado sus primeros contactos para tantear la posible reanudación del diálogo.
Bourita ha alegado que colaborarán con De Mistura y con el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, pero sobre el marco de la autonomía y «nada más». En su opinion, no cabe otra «solución irreal e inviable», en un aviso tanto al Frente Polisario como al conjunto de la comunidad internacional.
Este señalamiento se extiende tambien al ámbito económico, donde Rabat «cuenta con socios internacionales de buena fe que, con toda claridad y transparencia, invierten junto al sector privado nacional y contribuyen así al bienestar de la población».
Bourita ha recordado que Mohamed VI ya indicó «claramente» que Marruecos no entablará «ninguna medida económica o comercial que excluya al Sáhara marroquí», en un aviso a aquellos gobiernos con «posiciones vagas o ambivalentes» al que, por ahora, Rabat evita poner nombres.