Más de 170 internistas abordan novedades diagnósticas y terapéuticas en enfermedades autoinmunes sistémicas
Más de 170 médicos internistas de la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI) han abordado, en la XIV Reunión del Grupo de Enfermedades Autoinmunes Sistémicas (GEAS-SEMI), las novedades diagnósticas y terapéuticas de esta patología y el impacto de la pandemia sobre ella.
La EAS, detalla SEMI, está formado por un grupo heterogéneo de enfermedades con manifestaciones clínicas diversas y que pueden ocasionar daño a diferentes órganos y conllevar situaciones clínicas graves. En su origen comparten un fallo del sistema inmune, que deja de realizar su trabajo adecuadamente y pasa a producir daño en los propios tejidos y células del organismo.
Concretamente, las enfermedades más frecuentes son el Lupus Eritematoso Sistémico (afecta a 1 de cada 10.000 personas en España) y el Síndrome de Sjögren (lo padece el 0,5 por ciento de la población). Otras EAS serían la esclerodermia, el síndrome antifosfolípido, las miopatías inflamatorias y las vasculitis sistémicas. Muchas de ellas se tratan actualmente con inmunosupresores y medicamentos biológicos.
La reunión ha sido inaugurada por el presidente de la SEMI, el doctor Jesús Díez y por el médico internista de la SEMI, Salvador García Morillo. «Las enfermedades autoinmunes sistémicas entran claramente dentro del campo de acción de los médicos internistas y requieren de un abordaje integral», ha asegurado Díez.
Por su parte, García Morillo ha ensalzado la labor de los médicos internistas en cuanto a «actividades docentes y de investigación sobre las enfermedades autoinmunes sistémicas». La reunión ha tenido un total de ocho mesas redondas: cinco sobre patologías autoinmune y autoinflamatorias, una sobre avances en capilaroscopia con concurso de casos clínicos en dicha técnica diagnóstica, otra sobre experiencia clínica en relación con la COVID-19 y otra sobre formación y rotación en unidades docentes EAS.
En la mesa sobre lupus, se han presentado diferentes comunicaciones orales, como el Síndrome antifosfolípico catastrófico, que supone el uno por ciento de todos los síndromes antifosfolípidos y con un 37 por ciento de mortalidad, según datos del 2016.
Otra comunicación versó sobre Síndrome de Pulmón encogido asociado a LES. Con una prevalencia de entre el 0,8-1,6%, dicha entidad fue descrita por vez primera en 1965. Suele presentarse con disnea injustificada y elevación diafragmática. Se trata de una patología rara. La última comunicación de la mesa se tituló «Lo que hay detrás de la anemia», sobre un caso de una paciente mayor con insuficiencia cardíaca descompensada.
En cuanto a la COVID-19, el doctor José Antonio Todoli, de la UEAS-Servicio de Medicina Interna del Hospital Universitario La Fe (Valencia), ha insistido en que algunos pacientes con el virus han reflejado «alteraciones capilaroscópicas no específicas en hasta el 65 % de los casos».
En este sentido, se ha puesto de manifiesto que la ausencia de consultas presenciales por la COVID-19 ha conllevado «retrasos diagnósticos de nuevos pacientes con EAS» y «mayor dificultad para instaurar nuevos tratamientos», así como «incertidumbre sobre el pronóstico de la infección por COVID-19 en pacientes con tratamiento inmunosupresor y biológico», según ha afirmado García Morillo.