Álvarez avisa de que no basta con limitar la temporalidad: pide más multas económicas y hasta penales
El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha advertido este lunes al Gobierno de que su propuesta de limitar la temporalidad al 15% de la plantilla para reducir la precariedad laboral es «insuficiente y poco ambiciosa» y con ella «se conseguirá muy poco», pues el problema es que en España no se controla la contratación.
«La legislación no se cumple y la Inspección de Trabajo está mermada. La tabla de sanciones es absolutamente irrisoria. A un empresario le sale más a cuenta contratar de manera irregular aunque tenga visita de un inspector que contratar de acuerdo con la legislación», ha denunciado en declaraciones a TVE recogidas por Europa Press.
El dirigente sindical ha afirmado que no se podrá avanzar en la lucha contra la temporalidad y precariedad mientras no se castigue económicamente «de manera seria» la contratación irregular y se penalice a través del Código Penal a los empresarios que incumplan la legislación. «Tiene que haber medidas de choque para que las empresas sepan que esto se ha acabado», ha añadido.
Álvarez ha indicado que las palabras del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de este fin de semana sobre la derogación de la reforma laboral suponen, en su opinión, que el Ejecutivo «no sólo va a derogar las reformas laborales, sino que va ir a más allá», por ejemplo en lo que se refiere a la lucha contra la contratación temporal abusiva e injustificada.
Álvarez ha recordado que, el marco de sus compromisos con Europa, el Gobierno español se ha comprometido a tener lista esa reforma del mercado laboral antes de final de año. En este sentido, el líder de UGT espera que en noviembre puedan «visualizarse» acuerdos concretos o, si no es posible, decisiones del Gobierno que impliquen una modificación de la legislación laboral.
Pero además de la contratación, dicha reforma debe abordar la negociación colectiva para devolverle la capacidad que tenía antes de la reforma de 2012, según ha insistido Álvarez.
«Si el salario mínimo interprofesional ha cogido tanto peso en nuestro país es por la incapacidad para negociar los convenios colectivos derivada de la reforma laboral de 2012. Y eso lo hemos visto en el sector financiero donde se ha ido chantajeando a los trabajadores, obligándoles a llegar acuerdos porque si no, venía el despido colectivo», ha denunciado.
LA PATRONAL SABE QUE ES MEJOR UN MAL ACUERDO QUE UN ACUERDO BIPARTITO
Sobre las posibilidades de que la CEOE se descuelgue de un posible acuerdo para reformar el mercado laboral, Álvarez ha señalado que, aunque «está permanentemente con esa amenaza», sabe que para los empresarios «puede ser más fructífero un mal acuerdo que una decisión tomada a partir de un acuerdo con los sindicatos».
«Ellos saben que nosotros no vamos a hacer nada contra el empleo o contra la viabilidad de las empresas, pero ésta no es una negociación que hayamos empezado hace un mes o dos. Antes de empezar la pandemia teníamos avanzada parte de la negociación y ahora lo que tenemos que hacer es ir concretando», ha apuntado.
Sobre los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2022, el dirigente sindical ha señalado que son unos Presupuestos «muy ambiciosos, de una envergadura social y de transformación del país como nunca en la historia de España», aunque cree que habrá que ir «reajustando la letra». «La previsión de inversión en infraestructuras es altísima y no sé si vamos a tener capacidad de gastarla toda en 2022», ha apuntado.
Respecto a las posibilidades de impulsar una plataforma de izquierdas en torno a la figura de la actual vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, el máximo dirigente de UGT ha subrayado que sería «muy positivo» que la izquierda se organice para seguir impulsando una agenda de cambio.
«Yolanda Díaz es una mujer valiente, comprometida, radical, pero con los pies en el suelo, y con gran capacidad de negociación. Tiene muchas posibilidades de aunar una mayoría amplia en España para continuar con la agenda reformista», ha opinado Álvarez.
