Los economistas rebajan cinco décimas su previsión de crecimiento para este año, hasta el 5,8%
Mantienen en el 6% el alza del PIB para 2022
El Consejo General de Economistas (CGE) ha rebajado su previsión de crecimiento para la economía española este año desde el 6,3% al 5,8%, después de la revisión a la baja del Instituto Nacional de Estadística (INE) para el segundo trimestre.
No obstante, los economistas prevén que en el tercer trimestre se produzca un rebote que puede superar el 3%, por cierta recuperación del sector turístico y el aumento del consumo durante el período.
Además, el Consejo de Economistas espera que las exportaciones sigan mejorando al compás del mejor crecimiento de la eurozona, aunque han anticipado que probablemente, las importaciones crezcan aún más por los costes de los insumos del exterior, lo que «restaría fuerza al crecimiento».
Uno de los problemas que se está acrecentando en este trimestre es la inflación, que según los economistas está impulsada por el incremento de coste energético, que se ha situado en septiembre en el 4%, mientras que la inflación subyacente se ha incrementado tres décimas, hasta el 1%.
Además, estiman que el nivel de deuda pública acabará el año en torno a un 121,5% del Producto Interior Bruto (PIB), y que el déficit se situará entre el 8 y el 9%.
CARÁCTER EXPANSIVO DE LOS PGE PARA 2022
En cuanto a los Presupuestos para 2022, el presidente del CGE, Valentín Pich, ha señalado durante la presentación del Observatorio Financiero Informe septiembre 2021 , que «era de esperar» que las próximas cuentas públicas tuvieran un carácter expansivo.
«Bien es cierto que en los Presupuestos que está previsto que el Gobierno remita hoy al Congreso se incluyen 25.000 millones de euros de los fondos europeos, que esperamos sirvan para fortalecer la economía y consolidar la ansiada recuperación», ha señalado.
No obstante, considera que se debe aprovechar este momento para introducir dinámicas de mejora en el modelo productivo porque, más tarde o más temprano, volverán las reglas fiscales y los ajustes con objeto de reducir el déficit, tanto por parte de la Unión Europea como por el resto de operadores.