Los Veintisiete y los Balcanes se reúnen en Eslovenia con la falta de avances en la adhesión como telón de fondo
BRUSELAS, 6
Los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea se reúnen este miércoles con los líderes de los Balcanes en Eslovenia, en una cumbre llamada a reiterar el compromiso del bloque con la región, pero que llega en plena falta de progresos en la adhesión comunitaria.
La cita con Albania, Macedonia del Norte, Montenegro, Bosnia Herzegovina, Montenegro y Kosovo busca reivindicar la importancia estratégica de la región para la UE, así como escenificar la relación privilegiada del bloque con los Balcanes, a la postre mayor inversor y socio comercial, aunque no se concibe como una cita para avanzar en la integración europea.
La reunión llega en un momento de cierta parálisis en la política de Ampliación, en particular con el bloqueo a la apertura de negociaciones de adhesión a la UE de Albania y Macedonia del Norte que amenaza con dañar a la imagen del bloque en su conjunto. Aunque la entrada en el club comunitario se basa en el mérito y el ritmo de reformas de los aspirantes, en esta ocasión es una desavenencia política la que obstaculiza la senda europea de Tirana y Skopje.
Pese a que ambos candidatos cumplen las condiciones estipuladas por la Comisión Europea, según reconocieron los Veintisiete en marzo de 2020, cuando dieron luz verde a que arrancaran las negociaciones, el veto que ejerce Bulgaria desde el año pasado alegando disputas culturales con Macedonia se ha convertido en un nuevo obstáculo en sus aspiraciones comunitarias.
Bruselas defiende los contactos entre bastidores con Bulgaria y Macedonia para solventar el bloqueo y fuentes comunitarias señalan que la cuestión puede salir durante la cumbre. Sin embargo no hay previstos encuentros bilaterales del presidente del Consejo, Charles Michel, y en la capital europea apuntan que la cumbre tampoco será el momento propicio para zanjar el desencuentro.
La falta de progresos en materia de justicia o de lucha contra la corrupción de los países candidatos, además de una pérdida de apoyo a la UE en la zona son asuntos que los Veintisiete consideran que debe mejorar los Balcanes. La meta de ampliar la UE a los Balances se remonta a 2003 cuando se definió el ingreso de los países de la zona como un objetivo estratégico.
Así, distintas fuentes insisten en que la cumbre no se debe limitar a la dimensión de la adhesión europea y ponen el acento en los programas y fondos de la UE para mejorar las infraestructuras, cuestiones como el roaming o el compromiso de Bruselas en materia de vacunas y con la reconstrucción económica tras la pandemia. A este efecto se esperan anuncios sobre nuevos instrumentos que puedan apoyar la recuperación de la región tras el coronavirus.
COMPROMISO CON AMPLIACIÓN
En la declaración conjunta pactada por los Veintisiete, el bloque europeo expresa su «apoyo inequívoco» a la perspectiva europea de los Balcanes y reitera que una relación estrecha es de «interés estratégico mutuo», insistiendo en el compromiso con su política de Ampliación y en que es importante que la UE sea «capaz de integrar a nuevos miembros».
Antes de la cumbre, el debate en Bruselas se ha centrado en cómo debía referirse la UE a la aspiración comunitaria de los países balcánicos y si cabía hacer mención explícita a su ingreso en el bloque, a la vista de la falta de progresos.
Sobre el bloqueo de Bulgaria, la declaración urge a aumentar los esfuerzos de «reconciliación» en la región, incluyendo soluciones a «disputas bilaterales arraigadas en cuestiones del pasado».
La cita de Eslovenia también venía marcada por las tensiones en el norte de Kosovo, un asunto que se apaciguó días antes gracias a la mediación europea entre Belgrado y Pristina. El texto conjunto pide eso sí «progresos concretos» a las partes en la normalización de sus relaciones, que la UE ve como condición sine qua non para avanzar en la senda comunitaria.
Pese a ofrecer un importante apoyo a la región en la recuperación económica tras la pandemia y en los esfuerzos de vacunación, en lo relativo a la Ampliación, los Veintisiete insisten en que los países balcánicos deben avanzar y señalan que el apoyo europeo está vinculado a progresos tangibles en el área del Estado de Derecho y las reformas socioeconómicas, así como la adhesión a los estándares europeos.
ENCUENTRO CON KOSOVO
Otro de los temas que marcan la cumbre es la presencia de Kosovo, cuya independencia no reconocen cinco Estados miembros, entre ellos España. En todo caso, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez se sentará por primera vez frente a un dirigente kosovar aunque en un escenario sin banderas, ni símbolos nacionales, tratando así de tener una cumbre neutral, que no interfiera con la política de no reconocimiento de España, Grecia, Chipre, Rumanía y Eslovaquia.
Después de que el expresidente español Mariano Rajoy abandonara una cumbre similar en Bulgaria en 2018 para evitar el encuentro en plena crisis catalana y la anterior cita con los Balcanes en 2020 se celebrara por videoconferencia por la expansión del coronavirus, España da por superada la situación y tomará parte de la cita, recordando que participar no significa reconocer a Kosovo.