El Banco de España centrará sus análisis en la inflación, los tipos reducidos y el impacto del Covid
El Banco de España centrará sus análisis de este año y de 2022 en los determinantes del reciente aumento de la inflación y sus posibles factores amplificadores, así como en los retos de un entorno de tipos de interés reducidos para la rentabilidad del negocio bancario y las implicaciones y el impacto del Covid-19 en diversos aspectos económicos y financieros, entre otros temas.
Así figura en las prioridades analíticas y de investigación del Banco de España 2020-2024, que acaba de actualizar para incorporar los aspectos más novedosos. El pasado año ya estableció los cinco temas prioritarios de análisis, que sigue manteniendo, pero que ha mejorado ahora con otras incorporaciones.
En concreto, estos cinco temas prioritarios de análisis e investigación identificados son las políticas del banco central (monetaria, micro y macroprudencial) y sus interacciones; las principales tendencias de largo plazo (cambio climático, digitalización, envejecimiento, etc.); los riesgos y oportunidades procedentes del entorno internacional; las consecuencias agregadas de la heterogeneidad de los individuos y las empresas y el papel de las políticas económicas; y por último, las nuevas tecnologías y fuentes de información.
De este modo, en lo que resta de 2021 y en 2022 se mantienen las principales líneas de trabajo que se definieron entonces, pero ahora reenfoca algunas de estas líneas, de modo que cobran más importancia la evolución de la inflación, los bajos tipos de interés, la supervisión prudencial y la estabilidad financiera, la productividad y el crecimiento y la desigualdad en España y Europa.
Asimismo, el Banco de España priorizará las investigaciones sobre las interconexiones entre los principales componentes del sistema financiero y el impacto de la crisis Covid-19 sobre las mismas; los costes y beneficios de la aplicación de las herramientas macroprudenciales al sector bancario y su efectividad en la mitigación del riesgo sistémico.
En relación con las tendencias de largo plazo de la economía española, se prioriza el estudio del impacto a medio y largo plazo de la crisis sanitaria, con especial atención a sus efectos sobre la capacidad de crecimiento de la economía española y su estructura sectorial, tras el impacto desigual de la crisis sobre las distintas ramas productivas.
Igualmente, se analizarán las implicaciones del cambio climático para la política monetaria y la actividad de banca central, tras el compromiso incluido en la nueva estrategia de política monetaria del BCE para incorporar factores climáticos en la evaluación de la política monetaria y adaptar el marco operativo de la misma.
También se prestará atención al impulso de la automatización y la digitalización de la economía española durante la pandemia en áreas como el teletrabajo, el comercio electrónico, la enseñanza, etc., y sus efectos sobre las pautas de comportamiento de los hogares y las empresas.
En el ámbito de los riesgos y oportunidades procedentes del entorno internacional, se refuerza la prioridad del análisis de las siguientes cuestiones: las medidas y cambios institucionales activados en la Unión Europea en respuesta a la crisis actual, en especial el plan de recuperación NGEU y el papel de las reglas fiscales en la UEM; y el fortalecimiento del papel de las instituciones multilaterales y la coordinación global de las políticas económicas tras la crisis sanitaria.
También se analizará el impacto de la pandemia sobre la liquidez, el endeudamiento y la solvencia de las empresas españolas y el papel de las medidas mitigantes de política económica (avales públicos, moratorias, ayudas directas, recapitalizaciones, etc.); así como el desarrollo de métodos para identificar a los colectivos más vulnerables en una situación de crisis, con especial énfasis en la medición de la situación financiera de las familias y el papel de las competencias financieras.
ESTUDIO DEL EURO DIGITAL Y LOS CRIPTOACTIVOS
Finalmente, en el área de los retos para un banco central asociados a las nuevas tecnologías y fuentes de información, se priorizará el estudio del euro digital y las implicaciones de la introducción de una moneda digital de banco central para el sistema financiero y la economía en su conjunto, así como los determinantes de la formación de precios de los criptoactivos.
Al hacer público este enfoque renovado de las prioridades de análisis e investigación, el Banco de España subraya su «compromiso» con la «transparencia» de su actividad investigadora, a la vez que aspira a promover la colaboración en estas áreas con la comunidad académica y con el conjunto de analistas económicos.