Puigneró (Junts) niega que hubiera un acuerdo con ERC para que a la mesa vayan sólo miembros del Govern
Rechaza que haya una crisis de Govern pero avisa de que el conflicto «no se podrá resolver» sin Junts
BARCELONA, 15
El vicepresidente del Govern y conseller de Políticas Digitales y Territorio, Jordi Puigneró, ha negado este martes que hubiera un acuerdo verbal ni escrito con ERC para que en la mesa de diálogo participen sólo miembros del Govern, y ha defendido que han cumplido de forma «leal y escrupulosa» lo que recoge el acuerdo de legislatura.
En una entrevista en Rac1 recogida por Europa Press, ha replicado así a la consellera de Presidencia, Laura Vilagrà, que ha asegurado que existía un acuerdo verbal entre ambas partes para que la parte catalana la integraran sólo miembros del Ejecutivo catalán.
«¿Nos enseñan este acuerdo? Ha habido conversaciones en los que nos manifestaron su voluntad de que en la mesa sólo hubiera miembros del Govern. Era la voluntad de una de las partes, y nosotros dijimos que miraríamos qué posibilidades y opciones había», ha apuntado.
Según Puigneró, desde Junts han actuado siendo «fieles» al acuerdo de legislatura, que recoge que la delegación catalana tiene que ser escogida por consenso y nombrada por el Govern, con la voluntad que represente la pluralidad del proyecto independentista .
«MUY FEO»
Tras insistir en acusar al Gobierno de vetar la propuesta de nombres de Junts, ha considerado «muy feo» que lo hagan con nombres como el del secretario general del partido, Jordi Sànchez, y el del exconseller y vicepresidente de la formación, Jordi Turull.
También ha advertido de que «si alguien piensa que este conflicto se podrá resolver sin la participación de Junts va mal encaminado».
Pese a recalcar que el Govern no está en peligro, ha explicado que al presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, no le gustó la propuesta de Junts y que, pese a que puede entenderlo, ha reiterado que está en el marco del acuerdo de legislatura.
Además, ha negado que Aragonès acusara a Junts de actuar con deslealtad, y cree que la situación creada en el seno del Govern no es una crisis pero sí una «tensión» entre los socios de un Govern de coalición que están intentado encarrilar.