Vox pide al Gobierno que proteste ante el embajador de Cuba por tacharles de «fascistas»
Vox quiere que el Gobierno proteste formalmente contra el embajador de Cuba, Gustavo Machín, después de que este defendiera que son un partido fascista, amparándose en que en su calidad de representante diplomático no debería inmiscuirse en los asuntos internos de España.
Para ello, los de Santiago Abascal han presentado una proposición no de ley en el Congreso en respuesta a las declaraciones realizadas a finales de julio por Machín, quien según explican en su comunicado, dijo que la tercera fuerza política en España es «fascismo, tengo que decirlo, es fascismo», y que «aquellos que piden democracia para Cuba están aupados por la extrema derecha que dice que el franquismo es lo mejor que ha pasado, lo digo por Vox».
En este sentido, recuerdan que el Convenio de Viena que rige las relaciones diplomáticas entre países y la inmunidad del personal diplomático y que han firmado tanto España como Cuba estipula que dichas personas «deberán respetar las leyes y reglamentos del Estado receptor» además de estar obligadas a «no inmiscuirse en los asuntos internos de ese Estado».
Por ello, según esgrime Vox, el embajador cubano «no sólo ha realizado unas inaceptables declaraciones acerca de la tercera fuerza política de este país y de millones de españoles que apoyan al pueblo cubano en su lucha por la libertad y la democracia, sino que también ha violado» el citado convenio «al inmiscuirse en los asuntos internos de nuestro país».
Así las cosas, los de Abascal quieren que el Congreso inste al Gobierno a que presente una nota de protesta diplomática formal contra el embajador de Cuba, reclamándole que rectifique sus declaraciones sobre ellos y advirtiéndole sobre su injerencia en los asuntos internos de España.