Cs insta a Puig a «copiar la bajada de impuestos» de otras CCAA: «El Madrid nos roba es el mantra del nacionalismo»
VALENCIA, 25
La síndica de Ciudadanos (Cs) en Les Corts Valencianes, Ruth Merino, ha instado al president de la Generalitat, Ximo Puig, a «copiar propuestas como la bajada de impuestos» que se aplican en otras autonomías y a «abandonar el discurso de odio entre territorios, que recuerda a los peores vicios del nacionalismo y es una irresponsabilidad muy peligrosa». «El Madrid nos roba es el mantra del nacionalismo y solo hace que extender el discurso de odio entre españoles y es una gran irresponsabilidad», ha manifestado.
A su juicio, esta «estrategia de estar siempre criticando y mirando a Madrid no solo no es útil a los ciudadanos sino que además es peligrosa» y ha pedido copiar medidas como las bajadas de impuestos o cerrar por zonas para hacer frente a la covid» y «dejar la campaña electoral y hagan autocrítica para ver lo que están haciendo mal».
«Si el Consell está obsesionado con compararse con Madrid, podría copiar, por ejemplo, medidas útiles como las impulsadas por Cs allí donde ha gobernado, como la reducción de tasas a la hostelería o los cierres perimetrales que evitaron la ruina de sectores económicos», ha añadido en un comunicado Merino, tras criticar que el Gobierno valenciano «viva en permanente campaña electoral en lugar de ponerse a trabajar para solucionar los problemas de los valencianos como la infrafinanciación autonómica».
Merino ha asegurado que «si Puig quiere alcanzar la igualdad real entre todos los españoles, lo primero que tiene que hacer es dejar de obedecer a su jefe, Pedro Sánchez, y plantarse para conseguir una financiación justa para la Comunitat Valenciana».
«Pero de nuevo vemos cómo la falta de voluntad política nos seguirá condenando a los valencianos a disponer de menos recursos para servicios esenciales», ha subrayado la síndica de Cs, quien ha afirmado que la Comunitat Valenciana tiene el IRPF más alto de España y es campeona en deuda y déficit».
Sin embargo, lamenta que, mientras, el Gobierno valenciano «se enorgullece por haber tardado hasta siete meses en alcanzar la media española en vacunación, decreta restricciones durísimas sin contar con un comité de expertos o incluso permite la colocación de banderas en homenaje a uno de los mayores genocidas de la historia como Stalin en edificios públicos».