ERC pide derogar la vigente Ley de Seguridad Nacional y CUP y PDeCAT avanzan su rechazo a la nueva del Gobierno
Esquerra Republicana (ERC) ha pedido este martes derogar la vigente Ley de Seguridad Nacional, que data de 2015, mientras que la CUP y el PDeCAT han avanzado su rechazado a la nueva norma que en este ámbito está promoviendo el Gobierno.
En rueda de prensa en el Congreso, el portavoz parlamentario de ERC, Gabriel Rufián, ha anunciado que su grupo ha presentado una proposición de ley para suprimir la actual Ley de Seguridad Nacional que, a su juicio, «atenta de manera clara contra derechos fundamentales».
En su iniciativa, recogida por Europa Press, los independentistas catalanes justifican la necesidad de liquidar la citada norma porque es un texto jurídico «inexplicable y confuso» en tanto que interpreta la seguridad nacional como un concepto constitucional «cuando la Constitución de 1978 no recoge tal concepto».
«RETUERCE» EL ESTADO DE DERECHO Y ES UN «EXPOLIO» COMPETENCIAL
ERC también critica que el Gobierno, «sin previa consulta o deliberación previa» del Parlamento, pueda actuar vía real decreto cuando la situación sea interés para la seguridad nacional por la gravedad y la urgencia de sus efectos.
«Un retorcimiento del Estado derecho — a su juicio– que avala intervenciones excepcionales para situación de contestación social y que es digno instrumento ejecutorios de la llamada Ley Mordaza».
Y cuestiona, además, que la norma otorgue facultades a su juicio «exorbitantes» a la Presidencia del Gobierno y al Consejo de Seguridad Nacional para la absorción y centralización de todos los medios materiales y personales de las comunidades autónomas e incluso locales, «relegando» a éstas a un mero papel de «espectador».
Ello supone, para Esquerra Republicana, «un expolio competencial» además de un «menoscabo» a la autonomía política de comunidades como Cataluña y Euskadi, que cuentan ya con sus propias policías autonómicas.
«UN CATÁLOGO PELIGROSO DE REGRESIONES DEMOCRÁTICAS»
De su lado, tanto la CUP como el PDeCAT ya han avanzado su rechazo a la nueva Ley de Seguridad Nacional que persigue reforzar los mecanismos a disposición del Estado para acceder a los recursos necesarios para la gestión de crisis. Entre otros aspectos, permitirá movilizar a los españoles en caso de crisis, intervenir empresas y requisar bienes.
A este respecto, el diputado de la CUP, Albert Botrán, se ha mostrado contrario a una norma que, a su juicio, supone «un giro autoritario del Estado» porque ofrece «un catálogo peligroso de regresiones democráticas».
En la misma línea se ha manifestado el portavoz del PDeCAT en el Congreso, Ferrán Bel, quien ha avanzado que si el Gobierno no modifica los puntos que restringen fuertemente las libertades de los ciudadanos o el acceso a su patrimonio, la norma no podrá contar con su apoyo.