Un 30% de los fisioterapeutas han sufrido síntomas de COVID-19, según una encuesta de SATSE
Hasta un 30 por ciento de los fisioterapeutas han sufrido síntomas de COVID-19, según los resultados de una encuesta realizada por el Sindicato de Enfermería (SATSE) en toda España.
Además de asegurar haber tenido los síntomas de esta grave enfermedad en tres de cada diez casos, un 81,38 por ciento de los fisioterapeutas consultados por el Sindicato de Enfermería han reconocido que han tenido miedo a contagiarse en el desempeño de su trabajo y un 94,04 por ciento a poder contagiar también a sus familiares y/o amigos.
Otras consecuencias negativas que han sufrido por su labor en primera línea contra el coronavirus a lo largo de los últimos meses es el sentir cierto rechazo social, siendo un 26,68 por ciento los que así lo afirma, y el no sentirse apoyado por sus superiores, como un 51,68 por ciento señala en la encuesta.
Asimismo, un 55,53 por ciento de los profesionales encuestados por la organización sindical afirman que han empeorado sus condiciones de trabajo en los últimos meses y un 63,73 por ciento que se ha deteriorado el ambiente laboral en su unidad o centro.
De otro lado, el 81,34 por ciento de los fisioterapeutas consideran que no ha existido el personal suficiente para prestar la atención sanitaria más adecuada a los pacientes y la ciudadanía en general en su unidad o centro sanitario o sociosanitario durante la pandemia de COVID-19, y el 76,46 por ciento piensa que que no se ha reforzado el número de estos profesionales.
Consecuencia de ello es que un 67,85 por ciento reconoce que no tenían tiempo suficiente para prestar la atención más adecuada, lo que ha llevado a un 40,42 por ciento a prolongar su turno de trabajo para realizar todas aquellas actividades que no habían podido acometer.
Todo este cúmulo de factores y circunstancias han propiciado que un 29,43 por ciento de los fisioterapeutas consultados señale en la encuesta de SATSE que ha llegado a pensar en dejar la profesión si pudiese, mientras que un 10,28 por ciento afirma que ha necesitado ayuda psicológica especializada.
«La entrega, esfuerzo y dedicación en su lucha contra la COVID-19 ha pasado una grave factura a los fisioterapeutas de nuestro país que, ya antes de la pandemia, sufrían unas condiciones laborales muy precarias, que deben ser mejoradas por las distintas administraciones competentes cuando antes», concluyen desde la organización sindical.